El polémico Boris Johnson es el nuevo primer ministro de Reino Unido tras ganar los comicios de los miembros del Partido Conservador.
Johnson venció a Jeremy Hunt, quien funge como ministro de Exteriores, con una diferencia aplastante. ‘BoJo’, como se le dice coloquialmente, logró 92.000 votos, es decir 66% del electorado conservador, mientras que Hunt solo obtuvo 46.000 votos.
Thank you all for the incredible honour you have done me. The time for campaigning is over and the time for work begins to unite our country and party, deliver Brexit and defeat Corbyn. I will work flat out to repay your confidence
— Boris Johnson (@BorisJohnson) July 23, 2019
En su discurso tras haberse conocido los resultados, Johnson calificó de «formidable» a su oponente y dio las gracias a Theresa May, la primer ministro saliente, por su labor.
Asimismo, Johnson se mostró jocoso y de buen humor durante su discurso, algo que es habitual en él. En primera instancia hizo cinco promesas a través del acrónimo ‘DUDE’: Cumplir con el Brexit (Deliver), unir al país (Unite), derrotar al opositor laborista Jeremy Corbyn (Defeat) y energizar el Partido Conservador (Energise).
Many congratulations to @BorisJohnson on being elected leader of @Conservatives – we now need to work together to deliver a Brexit that works for the whole UK and to keep Jeremy Corbyn out of government. You will have my full support from the back benches.
— Theresa May (@theresa_may) July 23, 2019
«A los que tengan dudas, les digo: Vamos a tener el Brexit hecho el 31 de octubre», aseguró. El exalcalde de Londres deberá asumir el cargo este miércoles y comenzará a designar los miembros de su gabinete una vez sea oficialmente nombrado por la reina.
Numerosos retos le esperan a Johnson
El principal problema que se le avecina a Johnson es la cuestión del Brexit. Para lograr la salida del país de la Unión Europea deberá convencer y ganar las votaciones en el Parlamento, algo que no pudo hacer May.
También deberá someterse a un voto de confianza en la Casa de los Comunes si así lo solicita la oposición laborista. Además, deberá lidiar con la formación liderada por Corbyn, que ha tenido numerosos roces con May en el marco del Brexit.
The incoming prime minister has just 100 days to negotiate a new divorce deal with the European Union before the U.K. is due to leave the bloc https://t.co/XPhJkMwzHR
— Bloomberg UK (@BloombergUK) July 23, 2019
El Partido Conservador no suma la mayoría por sí solo en el Parlamento, lo que significa que deberá acordar con el DUP, Partido Unionista Democrático de Irlanda del Norte, para poder gobernar.
La UE ha dicho en numerosas ocasiones que no va a negociar nuevamente el acuerdo de retirada, el cual establece un periodo de transición para facilitar la retirada de Reino Unido.
La salvaguarda fronteriza entre la República de Irlanda e Irlanda del Norte es el obstáculo más grande que deberá superar Johnson. El nuevo primer ministro ya ha mencionado que pretende deshacerse del ‘backstop’ irlandés, algo que es inaceptable por el bloque europeo.
EEUU, China e Irán
Boris Johnson parece tener una buena relación con su par estadounidense, Donald Trump. Sin embargo, esta buena relación deberá traducirse en un importante apoyo económico para poder mitigar el impacto del Brexit, sobre todo si es de manera dura.
Las relaciones entre Londres y Washington se han visto alteradas tras la filtraciones diplomáticas en donde el embajador británico en EEUU calificó a Trump como inepto. No obstante, el mandatario estadounidense ha declarado su apoyo en repetidas ocasiones hacia Boris Johnson.
Ambas partes también han mencionado que desean alcanzar rápidamente un acuerdo de libre comercio amplio después de que Reino Unido abandone la UE, pero es probable que la rapidez con la que esto pueda lograrse dependa por entero de la voluntad política.
Congratulations to Boris Johnson on becoming the new Prime Minister of the United Kingdom. He will be great!
— Donald J. Trump (@realDonaldTrump) July 23, 2019
El nuevo gobierno británico también deberá tratar la cuestión iraní. La afrenta nuclear de occidente contra el país islámico ha generado diversas reacciones, con un EEUU decidido a detener al régimen de Hasan Rouhani y una UE mucho más cauta y decidida ha sostener el acuerdo nuclear.
Johnson deberá decidir qué vertiente tomar. Las previsibles buenas relaciones con Trump apuntan a que Reino Unido será severo con Irán, aunado a las recientes acciones de la Guardia Revolucionaria iraní contra buques petroleros en el estrecho de Ormuz.
Reino Unido también tiene una palabra importante con respecto a China, sobre todo con la guerra tecnológica en contra de Huawei. La empresa china, que ha sido objeto de sanciones por parte de EEUU, tiene importantes intereses en el país para desarrollar redes de telecomunicaciones, en especial la tecnología 5G.
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