La cantante Billie Eilish y su hermano y productor Finneas O’Connell fueron los grandes triunfadores de los Grammy 2020, demostrando el gran impacto que han tenido en la industria. Eilish se convirtió en la primera mujer en ganar las cuatro categorías principales (canción, grabación y álbum del año, además de nuevo artista) en una sola noche.
Eilish ganó canción y grabación del año con Bad Guy, mientras que su disco When We All Fall Asleep, Where Do We Go? no solo fue el mejor álbum de pop vocal contemporáneo, sino también el mejor álbum del año. Con 18 años, es la ganadora más joven en esta categoría después de Taylor Swift, que tenía 20 años cuando ganó con Fearless. Su hermano, además, triunfó por la producción del disco y se llevó el premio de productor del año.
En la previa, parecía que las principales categorías estarían repartidas entre Eilish y Lizzo, que finalmente solo se llevó el Grammy a mejor canción pop con su Truth Hurts. Es la segunda vez en los 62 años de historia de los Grammy que un artista gana las cuatro categorías principales, antes lo había hecho Christopher Cross en 1981. Adele también ha ganado las cuatro categorías, pero en años distintos.
“No preparamos un discurso de agradecimiento porque no pensamos que ganaría nada. No escribimos un álbum para ganar un Grammy, escribimos un álbum sobre depresión, pensamientos suicidas, el cambio climático y ser el ‘chico malo’, lo que sea que eso signifique. Estamos parados aquí, confundidos y agradecidos”, dijo O’Connell.
Rosalía brilla en el escenario
Antes de la gala televisada, Rosalía recibía su primer Grammy por su álbum El Mal Querer, galardonado como mejor álbum latino. La española dio un discurso en inglés, español y catalán, en el que agradeció al público y sus fans por recibir su proyecto con “mucho amor”.
El ascenso de Rosalía ha sido meteórico y lo comprobó más tarde al hacer una de las presentaciones más aplaudidas de la noche, en la que cantó su nuevo sencillo Juro que y su ya conocido Malamente. Fue una actuación, como ella misma dijo horas antes, inspirada en el flamenco.
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Otras presentaciones que llamaron la atención fueron la de Tyler The Creator, que se llevó el premio a mejor disco de rap con Igor; la de Camila Cabello, que le cantó a su padre emocionado; la de Ariana Grande, que el año pasado no estuvo por discrepancias con la Academia o la de Demi Lovato, que volvió a un escenario después de la sobredosis que sufrió en el 2018.
Sin embargo, la gala estuvo, inevitablemente, marcada por la tristeza debido al fallecimiento de la estrella del baloncesto, Kobe Bryant, y su hija de 13 años, Gianna. Lizzo abrió la gala usando un vestido negro y con un “esta noche es para Kobe”, antes de cantar sus éxitos Cuz I love you y Truth Hurts.
“Para ser honestos, todos sentimos una tristeza enorme. Esta mañana, Los Ángeles, América y todo el mundo han perdido un héroe. Esta noche estamos sobre la casa que construyó Kobe Bryant”, dijo Alicia Keys, la presentadora, antes de dedicarle un homenaje junto a Boyz II Men en el Staples Center.
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