La cultura del esfuerzo es fundamental para alcanzar los cambios que la sociedad reclama y que solo se podrán alcanzar con pasión y trabajo duro. Para ello, hacen falta referentes en los que mirarse, ejemplos que motiven e inspiren y transmitan esperanza, también femeninos para visibilizar que las mujeres con familia, como los hombres, pueden alcanzar el éxito profesional.
“¿Quién dijo que era fácil? No. Hacerlo todo no es fácil”. Para Belén García Molano, directora de Tecnología y Desarrollo de Airbus, el secreto radica en concentrar tiempo y esfuerzo en las tareas en las que puede aportar valor, ya sea en el ejercicio profesional o en cualquier otra actividad.
El liderazgo no viene marcado tanto por el género como por la actitud, máxime en el ámbito tecnológico, donde concurren profesionales con excelente formación y sólidos conocimientos. Confianza, compromiso e ilusión se combinan para definir un liderazgo que se fortalece con el trabajo en equipo, donde el talento contribuye a incrementar de forma exponencial las posibilidades de éxito.
Me encanta mi trabajo, me apasiona definir el futuro del sector aeroespacial. Ahora bien, me encanta también pasar tiempo con mis hijos, con mi pareja
Como tantas otras mujeres encasilladas en un rol, usted iba para maestra, pero acabó en la industria aeronáutica diseñando aviones y satélites. ¿Qué significa abrir caminos nuevos hasta ahora vetados para la mujer?
Abrir un mundo de posibilidades que, por un lado, puede cambiar la vida de muchas mujeres que podría dedicarse a cualquier profesión. Y también es importante permitir que esos sectores que han sido mayoritariamente masculinos se beneficien del talento de la mitad de la población. Está comprobado que la diversidad beneficia los resultados de los equipos.
¿Necesitan las nuevas generaciones referentes inspiradores y motivadores que incentiven la conquista de derechos, espacios y libertades?
Las nuevas generaciones necesitan referentes, independientemente del género, para que entiendan que trabajando duro y con pasión se pueden alcanzar los sueños.
La cultura del esfuerzo en este mundo a veces tan cortoplacista es fundamental para motivar a las nuevas generaciones para luchar por los cambios que requiere la sociedad en cualquier ámbito. También hacen falta referentes femeninos para normalizar que las mujeres con familia, al igual que los hombres, pueden tener una carrera profesional de éxito.
Como ingeniera, trata de mejorar la vida de los demás, pero ¿y la suya? ¿Cómo alguien que asume su responsabilidad puede atender a tres hijos y un hogar? ¿De qué forma conciliar?
Dudo si esta pregunta se la harías a mis compañeros hombres. Piensa el hecho de hacerme esta pregunta por ser mujer lleva intrínsecamente que asumes que la responsabilidad de los hijos y la conciliación está en mis hombros.
Me encanta mi trabajo, me apasiona definir el futuro del sector aeroespacial. Ahora bien, me encanta también pasar tiempo con mis hijos, con mi pareja.
¿Quién dijo que era fácil? No, hacerlo todo no es fácil. Mi secreto es priorizar y concentrar mi tiempo y mi esfuerzo en aquellas actividades donde realmente aporto más valor, tanto en casa como en el trabajo, y delego todo lo demás.
¿Qué hace falta para que los sueños de las niñas de hoy los convierta en realidad la mujer del mañana?
Hay que hacer visibles los referentes que permitan a las niñas ver claro que sus sueños son alcanzables; que no tienen limitación por su género y además deben ser conscientes de que son necesarias para construir el futuro.
Confiesa que le gusta la gente con actitud. ¿A qué se refiere cuando señala que hay un antes y un después en la forma de liderar?
Me encanta la gente con actitud. En el mundo tecnológico, los conocimientos se tienen de base, con gente muy formada. Es la actitud de cada persona lo que marca la diferencia y asegura el éxito. Y el líder puede influir en gran medida en la actitud de los miembros del equipo.
Los modelos de liderazgo han evolucionado a lo largo de los años. De modelos muy jerárquicos, donde las decisiones eran responsabilidad únicamente de los jefes, a modelos colaborativos, donde se saca partido del potencial del equipo, fomentando la responsabilidad y la comunicación como claves a la hora de conseguir los mejores resultados.
“La característica principal de un buen líder es saber cómo motivar a su equipo para obtener los mejores resultados; no es un asunto de género, una vez más es un tema de saber motivar e inspirar, para formar el mejor equipo”
El nuevo líder trabaja en fomentar la confianza, el compromiso y la ilusión por el trabajo de los miembros del equipo, siendo muy importante la dedicación al desarrollo y crecimiento de cada una de las personas que forman parte del equipo. Con estas condiciones de contorno en las que prima el sacar partido al talento, aumentan exponencialmente las posibilidades de éxito en cualquier proyecto.
¿Qué características debe tener el liderazgo femenino?
Personalmente no creo que se pueda diferenciar características de liderazgo femenino o masculino. La característica principal de un buen líder es saber cómo motivar a su equipo para obtener los mejores resultados; no es un asunto de género, una vez más es un tema de saber motivar e inspirar, para formar el mejor equipo.
¿Cómo acabar con conductas patriarcales como la de quien ante su presencia se pregunta si es la jefa o la becaria?
Esto es responsabilidad de todos, hombres y mujeres, debemos ser críticos con estos comportamientos. La mejor forma es hablar claro y no aceptar esos comentarios.
¿Y para desterrar ese sentimiento de inferioridad que alimenta miedos y complejos?
Todo el mundo tiene oportunidades de mejora que trabajar. En el caso de las mujeres ciertos sesgos son más pronunciados, como por ejemplo el síndrome del impostor, que yo misma he experimentado a lo largo de mi carrera, y he compartido con otras colegas mujeres.
Los líderes tenemos la responsabilidad del desarrollo de todas y cada una de las personas de nuestro equipo y tenemos que trabajar para que superen sus miedos o limitaciones y puedan sacar todo el potencial que tienen.
Anima a pensar diferente. ¿Es fundamental para evidenciar el talento femenino?
A mí me gusta hablar de talento diverso, puesto que es el que hace más productivos a los equipos, sobre todo cuando se trata de buscar soluciones a los problemas complejos.
En cuanto al talento femenino, por supuesto que hay que ponerlo en valor. La mitad de la población mundial son mujeres, no podemos permitirnos perder ese potencial.
Además de los objetivos de sostenibilidad para 2030, ¿qué logros se plantean en Airbus en materia de igualdad?
La diversidad es un regalo y tenemos que aprovecharlo. En Airbus somos muy conscientes de que los equipos diversos alcanzan los mejores resultados y en cuanto a diversidad de género ya llevamos años trabajando con una clara evolución que ya está dando resultados. Nuestra ambición es que en 2030 haya un 30% de mujeres en todos los niveles de la compañía y, para que esto pueda ocurrir, tenemos que actuar en muchas palancas de cambio, no solamente internas.
Y es que hay que fomentar las vocaciones STEM y para ello trabajamos con colegios, institutos y universidades no solo tratando de que los jóvenes conozcan lo apasionante que es el sector aeroespacial, también proporcionamos referentes de mujeres profesionales en el sector, con charlas, eventos, o programas de mentorización.