Áxel Capriles: «Hay un escondido miedo a la libertad, a tomar decisiones, y una epidemia psíquica de narcisismo”

Hay una comunión entre la inferioridad psicopática, el poder y el populismo autoritario. Todos tenemos, en me­nor o mayor medida, nuestros vacíos y lagunas de alma, nuestra propias cárcavas y fracturas, nuestros secretos irreparables. Al idealizar a una figura grandiosa que re­presenta nuestros defectos, nos sentimos redimidos y curados. Al encumbrarlas y hacerlas dueñas de la ver­dad absoluta, nos sentimos seguros.