La pandemia por el SARS-CoV-2 ha impulsado el uso de distintos medicamentos ya existentes en el mercado como alternativas para tratar la enfermedad de la COVID-19. Uno de ellos es la ivermectina, un fármaco que se administra vía oral para combatir algunos procesos provocados por parásitos o en forma de crema como tratamiento para la rosácea o sarna.
A pesar de que en los primeros meses de crisis sanitaria se hicieron varios estudios usando ivermectina en personas con SARS-CoV-2, en los que supuestamente se lograba exterminar el virus en 48 horas, nunca se pudo probar su efectividad. Hasta el momento, no hay evidencias suficientes que sustenten que el antiparasitario reduce la carga viral. Por tanto, la Agencia Europea del Medicamento (EMA) ha desacreditado su uso contra la COVID-19.
La ivermectina no alivia los síntomas de COVID-19
Una revisión reciente de 14 estudios de ivermectina, con más de 1.600 participantes, concluyó que ninguno proporcionó evidencia de la capacidad del fármaco para prevenir la COVID-19. Tampoco mejoraba las condiciones del paciente ni reducía la mortalidad. Todavía se están realizando otros 31 estudios para probar el fármaco.
Ante tantos puntos de vista contradictorios, investigadores del Centro de Enfermedades Infecciosas Pediátricas en Cali, Colombia, realizaron un ensayo controlado aleatorio publicado en la revista JAMA. En el estudio, asignaron al azar a más de 400 personas que habían desarrollado recientemente síntomas leves de COVID-19 para recibir un curso de cinco días de ivermectina o un placebo. Descubrieron que los síntomas de la enfermedad duraron alrededor de 10 días, en promedio, entre las personas que recibieron el fármaco. En comparación con 12 días entre los que recibieron el placebo, una diferencia estadísticamente insignificante.
Si bien el nuevo estudio agrega datos clínicos muy necesarios al debate sobre el uso del fármaco para tratar la COVID-19, es un ensayo relativamente pequeño y no responde del todo a la pregunta clínica más urgente: si la ivermectina puede prevenir COVID-19 grave o la muerte al estar expuesto a la enfermedad.
Intoxicaciones con ivermectina
Se han disparado las solicitudes de uso de ivermectina en pacientes alrededor de todo el mundo. Aunque los estudios y las agencias de salud advierten que el fármaco no funciona contra la COVID-19. Las recetas del popular fármaco han experimentado un fuerte aumento en las últimas semanas, saltando a más de 88.000 por semana a mediados de agosto desde un promedio de referencia prepandémico de 3.600 por semana, según investigadores de los Centros para el Control y la Prevención de Enfermedades de los Estados Unidos (CDC).
En algunas ciudades incluso hay escasez del medicamento. Este hecho es más que abrumador pues, aunque se suele recomendar para tratar la rosácea, piojos y otros parásitos, es más común su uso en animales. También hay un importante número de personas que aseguran haber obtenido ivermectina en los centros de suministro de ganado. En lugar de en las farmacias, donde no se consigue con regularidad.
Este aumento de recetas para administrar ivermectina a los pacientes con COVID-19 ha disparado las alarmas de las autoridades. Las llamadas a los centros de control de intoxicaciones por consumir el medicamento han aumentado drásticamente. Se han multiplicado por cinco con respecto a su línea de base en julio, según los CDC. Y la gran mayoría de las llamadas recientes provienen de personas que tomaron un producto veterinario en un intento de tratar o prevenir el virus.
Estadounidenses prefieren un medicamento no probado, antes que vacunarse
Los expertos entienden que todos quieran alguna cura para la COVID-19 porque es una enfermedad muy devastadora. Sin embargo, no se cansan de rogarle a la gente que dejen de usar ivermectina y en su lugar se vacunen, porque es la mejor protección que tenemos en este momento. «Todo lo demás es riesgo tras riesgo», advierten los médicos.
Quienes se intoxican con ivermectina suelen presentar náuseas, vómitos, dolor muscular y diarrea. En el pasado, ha habido muertes por sobredosis de ivermectina, aunque en ese momento no había relación alguna con la COVID-19. Es un riesgo para quien la toma.
La desinformación llega al gigante Amazon
Una vez que la Administración de Alimentos y Medicamentos (FDA) advirtió contra el uso humano de la versión animal de la ivermectina, la compañía estadounidense Amazon modificó sus motores de búsqueda para que al buscar la ivermectina arrojara resultados como una medicina antiparasitaria para caballos. Asimismo, el fármaco no seguiría siendo comercializado como un medicamento eficaz contra la COVID-19.
Al respecto, Craig Andrews, portavoz de la empresa, ha declarado que “las respuestas de autocompletado de Amazon son impulsadas por la actividad del cliente». Para evitar que siga apareciendo el resultado de ivermectina incorrectamente, «se están bloqueando ciertas respuestas de autocompletado para neutralizar este tipo de problemas», dijo Andrews.
Al hacer una búsqueda en Amazon, el usuario escoge alguno de los términos sugeridos en la plataforma, la cual simplemente enumera muchas opciones para comprar el medicamento destinado a tratar animales. Pero en ningún sitio indica contexto adicional sobre sus peligros cuando lo ingieren los humanos, lo cual es muy peligroso, según los médicos. Amazon no es la única empresa que enfrenta este tipo de situación actualmente. Algo similar ha sucedido en Reddit, Facebook, TikTok y con el motor de búsqueda de Google.
Promueven el uso de la ivermectina contra la COVID-19
En Estados Unidos está latente el debate sobre la administración de la ivermectina para tratar los síntomas de COVID-19. Pese a tener a su disposición y de manera gratuita en casi todas las esquinas la aplicación de las vacunas contra el virus, muchos ciudadanos prefieren rezarle a un fármaco de uso veterinario.
La FDA dice: «»No eres un caballo. No eres una vaca», en Twitter. Sin embargo, los medios de comunicación y sus principales personalidades y presentadores, como Tucker Carlson, Sean Hannity y Laura Ingraham de Fox News han mencionado la ivermectina como un medicamento que podría utilizarse para tratar la COVID-19.
Este episodio no es algo nuevo, a lo largo de la pandemia, diversos medios y sitios web de la derecha han promovido terapias no probadas para tratar el virus. Al mismo tiempo, han puesto en duda la eficacia de las vacunas y las mascarillas. Algo similar ocurrió con el uso de la hidroxicloroquina como posible tratamiento contra la COVID-19. A pesar de que los estudios indicaban que no era eficaz y de que las autoridades sanitarias advertían de que tomarlo podía tener graves efectos secundarios, muchos famosos instaron a adquirirlo como tratamiento para la COVID-19.
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