Por Cambio16
9/2/2017
El colectivo neonazi Hogar Social Madrid ha iniciado un boicot contra Starbucks en Madrid como rechazo a la medida tomada por su máximo responsable mundial, Howard Schultz, de contratar a 10.000 refugiados en los locales que tiene repartidos por el planeta.
«Aquí se contratan refugiados mientras tú estás en paro», reza uno de los carteles con los que Hogar Social Madrid ha empapelado varias de las cafeterías que tiene Starbucks en la capital española. El objetivo, según el propio colectivo, es el de «protestar por el contrato de 10.000 refugiados en Starbuck, teniendo España un 23% de paro».
Además de los papeles, el grupo neonazi ha plantado pegatinas en los escaparates de las cafeterías mostrando el logo de la empresa bajo el nombre ‘Starburka Refugees’ y con una mujer portando un burka y la media luna, símbolo del Islam, en vez de la clásica sirena con la corona.
La campaña se ha difundido a través de las redes sociales con el hashtag #Starburka y se suma así a las numerosas polémicas que acumula el grupo por su decisión de dar ayuda humanitaria «solo a residentes». Además, en Twitter ha llegado a ser uno de los temas más comentados de la tarde tanto por personas favorables como detractores.
La campaña se inicia después de que el presidente y consejero delegado Starbucks, Howard Schultz, anunciara a finales de enero que la cadena estadounidense contratará a 10.000 refugiados durante los próximos cinco años. Y lo hacía en respuesta a la orden ejecutiva en materia de inmigración emitida por el presidente de Estados Unidos, Donald Trump.
Las críticas hacia Hogar Social se centran en que la decisión del CEO de Starbucks no es solo en cuanto al contrato de personas en España, sino en todo el mundo. Asimismo, los contrarios a boicotear a la empresa mencionan que el Estado español, en diciembre de 2016, solo había acogido a 687 refugiados de los 17.337 que pactó con la Unión Europea en 2015, el 5% del total.
Por otra parte, en cuanto a los contratos de la cafetería en España corresponden en su totalidad al Grupo Vips, quien tiene el 100% de la marca en el país tras la compra del 49% que le restaba en 2016.
El grupo es conocido por repartir comida entre españoles necesitados. Hace unos meses, se instaló en un edificio abandonado en el número 107 de la calle Velázquez, en plena Milla de Oro de la capital.