Se agotó el plástico de un solo uso para Amazon. La compañía de comercio por Internet prohibirá la venta de productos fabricados con plástico oxodegradable en sus tiendas de la Unión Europea, el Reino Unido y Turquía a partir del 21 de diciembre. Todos los colaboradores comerciales de Amazon deberán cumplir con esa política al igual que la propia compañía.
La medida acabará con los productos plásticos a los que se les da un solo uso y, ente otros, afectará los que son fabricados con plásticos biodegradables. Cubertería, platos, bastoncillos, pajitas y palos empleados para darle soporte a los globos desaparecerán. También los recipientes de alimentos y bebidas que son fabricados con poliestireno expandido, incluidos vasos, tapones, tapas y tazas.
En caso de que algún vendedor tenga algunos de esos productos almacenados en un centro logístico de Amazon, podrá venderlo hasta el 20 de diciembre de 2020. De lo contrario, puedes pedir que se lo trasladen a una ubicación escogida sin costo alguno.
Amazon y su medida cónsona
Pareciera que la prohibición de los productos de plástico tiene todo el sentido posible. Ya la Eurocámara y el Gobierno Español han prohibo la venta de objetos desechables hechos de plástico a partir de 2021.
En el caso de España, no se podrán comercializar productos de plástico de un solo uso a partir de julio del próximo año. Una medida que se complementaría con otra prevista para el 2023, la prohibición de distribución gratuita de vasos y otros envases de este mismo material.
De acuerdo con la Directiva (UE) 2019/904 del Parlamento Europeo y del Consejo, quedan prohibidos cubiertos, platos, pajitas, bastoncillos de algodón, agitadores de bebidas, palitos destinados a sujetar e ir unidos a globos, recipientes para alimentos hechos de poliestireno expandido, productos fabricados con plásticos oxodegradable.
Conseguir vasos y platos de plástico en Amazon actualmente es una tarea sencilla. Los típicos para fiestas de cumpleaños y reuniones están disponibles a tan solo un clic de distancia, aunque ahora están destinados a desaparecer.
En junio de este año la empresa estadounidense ya había aplicado medidas relacionadas con la reducción de plástico en la India. Eliminaron el plástico de un solo uso en los empaques. Los materiales de embalaje fueron reemplazados por cojines de papel y cintas de papel “100% biodegradables, sin plásticos”.
En aquel momento la compañía indicó que todos los centros logísticos de Amazon en la India, más de cincuenta, estaban cumpliendo con la medida.
Menos plástico, más dudas
Prohibir el uso del plástico no necesariamente es la alternativa más correcta para salvar el medioambiente, o por lo menos no de manera radical. Así lo creen diversos expertos.
Cambiar materiales de embalaje y sustituir productos modificando sus materiales podría contribuir con un aumento de la contaminación. Las botellas de vidrio, por ejemplo, son mucho más pesadas que el plástico, por lo que transportarlas es más contaminante.
Lo mismo ocurre con las bolsas de papel, que tienden a presentar mayores emisiones de carbono que las bolsas plásticas. Además, suelen ser más difíciles de reutilizar. Para los expertos de Green Alliance, que realizaron el estudio Plastic Promises, el uso de nuevos materiales en sustitución del plástico y la aplicación de medidas que buscan eliminarlo no se han evaluado de la manera más adecuada.
¿Engaño de Apple con el estuche del iPhone?
Apple fue una de las grandes compañías que se sumó a la reducción de materiales para la distribución de sus productos. El gigante de la tecnología anunció que su último iPhone 12 estará en una caja más pequeña, sin cargador y auriculares, debido a su supuesto compromiso con el medioambiente.
Sin estos accesorios, indican que se consumirán menos recursos para el embalaje por unidad. Lo que permite que un 70% más de productos quepan en una sola paleta de envío, un hecho que estaría reduciendo las emisiones derivadas del transporte de los teléfonos.
Sin embargo, los críticos han argumentado que las intenciones de Apple son más financieras que ecológicas. Quienes deseen comprar un nuevo teléfono tendrán que comprar el cargador y los auriculares por separado, accesorios que también vienen empaquetados y cuyo proceso de producción y distribución estaría incidiendo en la contaminación que dicen esperan disminuir.
¿Un mundo sin plástico realmente tiene menos contaminación?
Las bolsas y materiales de plástico están hechos de subproductos del petróleo, lo que quiere decir que son materiales que ya han sido extraídos y procesados para otros fines. Contrario a lo que ocurre con el papel, hechos de árboles y materia prima fresca.
Los árboles actúan como sumideros de carbono, almacenando de manera temporal el carbono de la atmósfera, lo que disminuye los niveles de dióxido de carbono de la atmósfera y, por tanto, reduce el cambio climático. Fabricar papel implica mayor deforestación y daños en los ecosistemas.
Por otro lado, la producción de papel también requiere muchos más recursos en término de energía y agua. Para producir una bolsa de papel se requiere aproximadamente un 10% más de energía que para hacer una de plástico. Además de cuatro veces más agua.
A esto se le suma el factor peso. Las bolsas de papel, solo por poner este material como un ejemplo en sustituto del plástico, tiene más masa y son mucho más pesadas. Esto quiere decir que trasladarlas requiere de mayor combustible, lo que a su vez implica mayor contaminación. Esto se duplica si son materiales mucho más pesados como el vidrio.
Durante el proceso de combustión de la gasolina se crean varios gases dañinos para el medioambiente. Dióxido de carbono, óxido de nitrógeno, monóxido de carbono y moléculas de hidrocarburos que no se queman durante la combustión son algunos de los factores que afectado la atmósfera. Todo eso se incrementaría si se requiere más combustible para el traslado de productos y materiales.
Amazon dio un primer paso en pro de disminuir la contaminación por plástico. Un problema que afecta sobre todo a los océanos, adonde se estima que cada año llegan 10 millones de toneladas de plástico y amenaza la vida marina.
Sin embargo, todavía hay 8.300 millones de toneladas de plástico en todo el mundo y no hay una respuesta sobre los materiales que podrían sustituir su uso sin impactar la salud del planeta.
Lea también: