Por Cambio16
18/04/2018
Un allanamiento a Porsche y a Audi en Alemania abre un nuevo capítulo del controvertido «diéselgate». Este miércoles, fiscales alemanes allanaron varias sedes de las marcas filiales de Volkswagen (VW) por presunto «fraude» relacionado con la saga de emisiones de diésel de su grupo matriz.
«Confirmamos que los investigadores realizaron un allanamiento a Porsche en Stuttgart y a Audi en Ingolstadt. Audi AG y Porsche AG cooperan plenamente con las autoridades. No podemos comentar más detalles debido a la investigación en curso» escribió Porsche en un comunicado.
El allanamiento a Porsche y a Audi se producen unos días después de que Volkswagen iniciara una reestructuración masiva de su plana mayor. Dichos cambios incluyen la sustitución de su director ejecutivo y la promoción de Oliver Blume, el director de Porsche, para el consejo de administración del Grupo VW. No obstante, fuentes cercanas a las firmas aseguraron que los allanamientos no guardan relación con los cambios en la directiva.
El presidente de Porsche, Hans-Dieter Pötsch, dijo el viernes que la reestructuración llega en un momento en que, «en gran medida Volkswagen ha dejado atrás la crisis del diesel».
El allanamiento a Porsche abre la puerta a nuevas revelaciones
Los fiscales que realizaron el allanamiento a Porsche y a Audi recibieron ayuda de autoridades de Munich quienes mantienen en custodia a Wolfgang Hatz. Por consiguiente, el procedimiento puede abrir la puerta a nuevas revelaciones. Fundamentalmente porque Hatz fue un ejecutivo e ingeniero de alto rango que trabajó en las marcas VW, Audi y Porsche. Fue jefe de motores de Audi hasta 2007. Y luego pasó a Porsche hasta 2011 hasta cuando fue suspendido, con pocas explicaciones. Tras la revelación del «diéselgate» en 2015, el nombre de Hatz volvió a los titulares.
Las acciones de VW habían subido fuertemente en las noticias de reestructuración de la semana pasada. Ahora, tras el allanamiento, cayeron solo 0.2 por ciento en el momento de la publicación.