Alemania cuestiona la propuesta de la Comisión Europea (CE) de clasificar la energía nuclear y el gas natural como inversiones «verdes». El gobierno de coalición de Olaf Scholz considera que la energía nuclear “es peligrosa” y que la posición de Bruselas desvía los objetivos climáticos.
El primer día de 2022 la CE difundió un documento en materia energética. tras consultas con expertos. Señaló que “el gas natural y la energía nuclear tienen un papel como medio para facilitar la transición. Y avanzar hacia un futuro predominantemente basado en energías renovables”.
El informe de las autoridades comunitarias apunta hacia el gas natural y la energía nuclear como claves para un futuro en el que predominen las energías renovables. «Esto significaría clasificar estas fuentes de energía bajo condiciones claras y estrictas», describió el texto.
En ese sentido, el gobierno alemán anticipó críticas al planteamiento del ejecutivo de la UE. El principal punto de disconformidad es la inclusión de las centrales de gas natural.
La iniciativa europea busca clasificar el gas natural y la energía nuclear como amigables con el medio ambiente. Para eso, propone incluir estas energías en una lista de certificación verde -o taxonomía ambiental- para las inversiones en el sector energético. Este proyecto forma parte de los planes del bloque para descarbonizar la economía, construir centrales eléctricas más limpias. Y también para que las inversiones tengan un foco en tecnologías y empresas más sostenibles.
Además, para garantizar la transparencia, la Comisión modificará la Ley Delegada de Divulgación de Taxonomía. Esto, para que los inversores puedan identificar si las actividades incluyen gas o nucleares. Y en qué medida para que puedan tomar una decisión. La CE argumenta también que las actividades cubiertas en la propuesta, acelerarían la eliminación de fuentes más nocivas, como el carbón.
Alemania se opone a la iniciativa de la CE
Alemania está en camino de apagar sus tres centrales nucleares restantes a fines de este año y eliminar el carbón para 2030. Mientras que su vecino Francia apunta a modernizar los reactores existentes y construir otros nuevos para satisfacer sus necesidades energéticas futuras. Berlín planea depender en gran medida del gas natural hasta que pueda ser reemplazado por fuentes de energía no contaminantes.
Los senderos opuestos tomados por dos de las mayores economías de la UE han resultado en una situación incómoda para el ejecutivo del bloque. En especial, la de Alemania que cuestiona el planteamiento de la CE.
«Consideramos que la tecnología nuclear es peligrosa», dijo el portavoz del gobierno Steffen Hebestreit a los periodistas en Berlín, según Associated Press. Y adicionó que la cuestión de qué hacer con los desechos radiactivos, que durarán miles de generaciones, sigue sin resolverse.
Hebestreit sostuvo que Alemania «rechaza expresamente» la evaluación de la CE sobre la energía atómica. El gobierno está considerando sus próximos pasos sobre el tema, adelantó el vocero.
En su opinión Hebestreit enfatizó que el objetivo del gobierno alemán es utilizar el gas natural solo como una “tecnología puente”. Y reemplazarlo con alternativas no contaminantes como el hidrógeno producido con energía renovable para 2045. La fecha límite que el país ha fijado para convertirse en climáticamente neutral.
A la fecha, Los Verdes, el segundo partido más importante del gobierno, criticó duramente el proyecto. El ministro de Clima y Economía y vicecanciller, Robert Habeck, declaró que le parecía que la propuesta de la UE «diluye la buena calificación de la sostenibilidad. Es cuestionable que este lavado verde sea aceptado por los mercados financieros». Entretanto, la ministra de Medio Ambiente, Steffi Lemke (también de Los Verdes), calificó la propuesta de la UE de «cuestionable.
EE UU elimina material radiactivo y peligroso
En el debate, que apenas inicia tras la propuesta de la CE y la reacción de Alemania, hay otros países que adecúan sus plantas eléctricas en concordancia con el freno al cambio climático.
Un largo proyecto para excavar y eliminar desechos radiactivos y peligrosos enterrados durante décadas está casi terminado en EE UU. Se trata de desechos en pozos sin revestimiento, ubicados en una instalación nuclear que se asienta sobre un acuífero gigante en el este de Idaho.
El Departamento de Energía de EE UU informó que eliminó la cantidad final de desechos enterrados e incluye el Idaho Laboratorio Nacional.
Además, los desechos radiactivos objetivo incluían filtros contaminados con plutonio, moldes de grafito, lodos que contienen solventes. Así como uranio oxidado generado durante el trabajo de producción de armas nucleares en la planta Rocky Flats en Colorado. Algunos restos radiactivos y peligrosos en el vertedero de Idaho recibirán una cubierta de tierra.
El proyecto de limpieza, que comenzó en 2005, se denomina Proyecto de recuperación acelerada. Y es uno de aproximadamente una docena de esfuerzos de limpieza de desechos nucleares terminados o en curso.
Explicó el Departamento que el proyecto, el cual involucra el relleno sanitario, es parte de un acuerdo de 2008. Dirigido a excavar y eliminar tipos y cantidades específicas de material radiactivo y peligroso.
La agencia dijo que eliminó alrededor de 13.500 yardas cúbicas (10.300 metros cúbicos) de material, lo que equivale a casi 50.000 tambores de almacenamiento que contienen 55 galones (208 litros) cada uno.
La mayoría de los desechos se enviaron a la planta piloto de aislamiento de desechos del gobierno de EE UU, en Nuevo México para su eliminación permanente. El Departamento de Energía anunció que la limpieza del relleno sanitario, se ha adelantado 18 meses antes de lo programado.