La Agencia Internacional de Energía afirme que la industria de combustibles fósiles socava los objetivos climáticos globales para limitar el calentamiento al hacer muy poco para frenar sus emisiones de metano, un gas de efecto invernadero hasta 84 veces más potente que el dióxido de carbono en términos de capacidad para atrapar calor en la atmósfera.
Los datos de la IEA certifican a la industria energética como el segundo emisor de metano de origen humano, solo la agricultura genera mayores emisiones del gas. Durante 2022, el 40% de las emisiones de metano llegaron a la atmósfera gracias a ella.
Las emisiones de metano pueden ocurrir en todo el proceso de la industria energética. Desde la producción hasta el transporte y la distribución. Algunas de las principales fuentes de emisiones incluyen las fugas de gas en pozos y tuberías o la ventilación de gas en las operaciones de perforación. Así como la quema intencional de gas en los sitios de producción. El informe apuntó:
“Para la industria del petróleo y el gas, solucionar el problema de las emisiones de metano se reduce sobre todo a encontrar y reparar fugas. La industria del carbón podría capturar el metano de las minas y utilizarlo después”.
Recientemente, la IEA publicó su informe anual, Methane Gas Tracker. En el documento reveló que 75% de las emisiones de metano de la industria de combustibles fósiles son reducibles con tecnologías baratas y fácilmente disponibles. Igualmente, el informe resaltó que las emisiones de metano se mantuvieron “obstinadamente altas”. Indicó que factores como la incertidumbre económica y las preocupaciones sobre la seguridad del suministro, debieron ser razones para que se reportaran recortes de emisiones en 2022.
El director ejecutivo de la IEA, Fatih Birol, dijo que “los recortes de metano se encuentran entre las opciones más baratas para limitar el calentamiento global a corto plazo”. Además, resaltó que simplemente no hay excusa para que la industria de la energía no efectuó los recortes de emisión.
A la industria de combustibles fósiles le falta compromiso
La industria de combustibles fósiles tiene un papel fundamental que desempeñar en la lucha contra el cambio climático. La reducción de las emisiones de metano no solo es esencial para cumplir con los objetivos del Acuerdo de París. También puede generar importantes beneficios económicos y ambientales.
Sin embargo, el documento de la autoridad energética criticó la negativa de los máximos exponentes de la industria energética a realizar el aporte de 100.000 millones de dólares necesarios para que las tecnologías encabecen los recortes de emisiones. La suma representa menos del 3% de las ganancias de la industria de combustibles fósiles en 2022.
Importantes representantes de la industria energética como Shell , BP, ExxonMobil y otros generaron beneficios récord el año pasado. La guerra de Rusia en Ucrania provocó un alza de los precios del petróleo y el gas natural. En consecuencia se exhortó a las empresas a hacer más para contener las emisiones que cambian el clima.
Birol reconoció que se están haciendo algunos progresos, pero las emisiones siguen siendo demasiado elevadas y no disminuyen con la suficiente rapidez. Enfatizó que reducir las emisiones de metano de la industria energética, es una de las opciones más baratas para limitar el calentamiento global a corto plazo. “Simplemente no hay excusa», expresó.