Por Narkys Blanco
22/03/2018
El acuerdo nuclear EEUU-Irán está en vilo tras la salida de Rex Tillerson del Departamento de Estado estadounidense. Su sustitución por ex jefe de la CIA Mike Pompeo ha abierto múltiples especulaciones, pues uno de los principales objetivos de Pompeo puede ser Irán, con un impacto directo en el actual desenvolvimiento del mercado petrolero.
El ex CEO de Exxon Mobil y del Departamento de Estado era visto como un moderado relativo en relación al acuerdo nuclear EEUU-Irán. De hecho, en varias ocasiones, alertó a Trump de no tomar alguna decisión drástica que pudiera afectar los actuales términos del acuerdo. En comparación, Mike Pompeo es de una línea más dura. El ex CIA ha pedido previamente derrocar el acuerdo nuclear EEUU-Irán. Incluso, pocos días después de la elección de Trump, Pompeo escribió en Twitter: «Espero con ansias revertir este desastroso acuerdo con el mayor patrocinador estatal de terrorismo«.
Pero ¿qué significa todo esto para los mercados petroleros?. Un estudio reciente del Centro de Política Energética Global de la Universidad de Columbia analizó algunos escenarios potenciales. El informe estima que Irán podría perder alrededor de 400,000 a 500,000 bpd. Y ésto sólo en el primer año, en caso de regresar las sanciones de Estados Unidos contra las compras de petróleo iraní. Esa cifra aumentaría a alrededor de 600,000 bpd si los Estados Unidos logra unir a China, India o Turquía en consenso a su posición.
Detonar el acuerdo nuclear EEUU-Irán. ¿Una «opción nuclear «para las ganancias estadounidense?
De ser así y cerrar el pacto, esta opción reduciría las existencias de petróleo. En especial si nos referimos a las de la OPEP, que subirían inmediatamente los precios. Razón suficiente para que Estados Unidos salga favorecido. Su creciente producción de esquisto es suficiente para abastecer una emergente ausencia de oferta.
No obstante, el mandatario estadounidense deberá sondear sus apoyos. Primeramente, su reciente medida de aranceles al acero y su anuncio de «impuestos especiales» a China aún mantienen muy caldeados los ánimos. Asimismo, deberá medir la reacción internacional. No está claro cómo Irán podría responder. En lo que respecta al petróleo, el informe de la Universidad de Columbia señala que lo que constituye «petróleo crudo» es algo subjetivo. Queda por verse cómo las exportaciones de petróleo iraníes se ven afectadas por acciones específicas de EEUU.
Trump tiene que volver a certificar periódicamente que Irán está cumpliendo con los términos del acuerdo. Por ende, esto obliga a Trump a renunciar a emitir sanciones durante varios meses. Trump ha hecho esto varias veces. Eso sí, a regañadientes y en parte debido a la persuasión de Tillerson. Pero con Tillerson fuera y Pompeo adentro, la historia puede cambiar cuando llegue la fecha de recertificación, la cual tendrá lugar el venidero 12 de mayo.