Por Cambio16 | Efe
18/01/2016
El presidente del Gobierno, Mariano Rajoy, ha acusadoal líder del PSOE, Pedro Sánchez, de buscar «a toda costa» el apoyo de «los independentistas y los extremistas» para logra una especie de «Pacto del Tinell» con el fin de impedir un Ejecutivo del PP.
Rajoy, en una entrevista en Radio Nacional, se ha mostrado dispuesto a pactar con los socialistas una reforma constitucional y ha asegurado que a la espera de la sesión de investidura, él, en cualquier caso, prevé seguir en la vida política aunque su intención es continuar haciéndolo como presidente del Gobierno.
Considera que Sánchez está intentando «tomar el pelo a los demás» y demostrando con sus declaraciones (como en las que ayer le acusó de «dar alas» al independentismo) que habla mucho y no explica la razón por la que cede senadores a Convergencia y ERC para que tengan grupo en la Cámara Alta.
A falta de esas explicaciones, Rajoy está convencido de que Sánchez está intentando una especie de «Pacto del Tinell», por el que Pasqual Maragall consiguió la Presidencia de la Generalitat de Cataluña.
Para conseguirlo, cree que el líder del PSOE está dispuesto a hacer «las cesiones que sea» y abdicar de su responsabilidad» llegando a acuerdos con «independentistas, rupturistas y extremistas» que desean «liquidar» el modelo de la Constitución.
Y para intentar distraer a la opinión pública de ese objetivo es por lo que cree que Sánchez le ataca a él en sus declaraciones.
Rajoy ha asegurado no entender la decisión del PSOE de ceder senadores a Convergencia y ERC para que tengan grupo y que tampoco entendería que los socialistas hicieran lo mismo en el Congreso para facilitar más de un grupo de Podemos. Además, ha augurado que si el secretario general del PSOE encabeza un Gobierno como ese «acabaría como el rosario de la aurora».
Rajoy ha mostrado su disposición a hablar con el PSOE para intentar un acuerdo en torno a la formación de un Ejecutivo y cree que hay muchas cuestiones básicas que les unen y «mucho margen» para entenderse. Insiste en que para él lo ideal es un Gobierno PP, PSOE y Ciudadanos.
El secretario general del PSOE, Pedro Sánchez, ha respondido al presidente del gobierno en funciones sobre la gran coalición que promueve para esta legislatura que «no es que no».
Pedro Sánchez ha hecho estas declaraciones en la pedanía murciana de Cabezo de Torres, donde se ha reunido con un centenar de trabajadores de empresas conserveras e industrias auxiliares para anunciarles, como se comprometió en campaña electoral, la derogación de la reforma laboral y la aprobación de un nuevo estatuto de los trabajadores si llega al Gobierno.
Por su parte, aunque el PP no llevaba en su programa una reforma de la Constitución, Rajoy ha asegurado estar dispuesto a escuchar las propuesta de los socialistas (que ha dicho que no se han explicado más allá de decir que desean una España federal).
No cree Rajoy que haya que cambiar la reforma laboral porque sería «un disparate» dar marcha atrás en reformas que han dado fruto, cree que no hay ningún problema con la ley de Seguridad Ciudadana y defiende en materia de educación que debe ser la legislatura de la formación profesional dual. Tampoco está dispuesto a reformar la Lomce.
El presidente no descarta hablar de cuestiones como la bajada del IVA cultural y recalca que debe haber acuerdos para abundar en las políticas reformistas en vez de preocuparse por lo que hay que derogar del pasado.
Respecto al momento que cree mejor para la sesión de investidura se ha limitado a señalar que «cualquier fecha es buena» aunque defiende que sea cuanto antes.
Al plantearle si estaría dispuesto a dar un paso atrás si esa es la exigencia del PSOE para facilitar un Gobierno encabezado por el PP, ha explicado que no se trata de un problema de personas, sino de partidos. Además, ha asegurado que nadie de su partido le ha pedido que haga esa reflexión.
Tras lo vivido en la sesión de constitución del Congreso con imágenes como algún diputado con rastas y con Carolina Bescansa, de Podemos, llevando a su hijo al hemiciclo, ha dicho que «a estas alturas» de su vida, pocas cosas le «descolocan» ya y no va a entrar en cómo visten unos u otros