Por Andrés Tovar
03/11/2016
El propósito de Elon Musk y su Masterplan de “crear impresionantes techos solares con batería de almacenamiento totalmente integrados” ya es una realidad. El fundador y CEO de Tesla y el CEO de Solar City, Lyndon Rive, anunciaron en agosto su propósito de desarrollar una solución para autoconsumo en el hogar en el que los módulos fotovoltaicos estuvieran integrados en el propio techo y no formaran unidades añadidas. Así, en un evento que tuvo lugar en la última semana de octubre, Tesla y SolarCity han presentado las primeras tejas solares del mercado «capaces de dotar de la energía necesaria a un hogar medio norteamericano»; la segunda generación de Powerwall, aquella enorme batería para el hogar que nace mejorada; y un nuevo cargador eléctrico para los coches de Tesla, que mejora su autonomía y velocidad de carga. Esta es la visión de futuro basado en las energías renovables desde Tesla, y aquí sus productos presentados que darán mucho de qué hablar.
Tesla viene trabajando desde su fundación por la transición hacia una economía sostenible no dependiente de los combustibles fósiles y la compra del instalador de paneles solares Solar City forma parte de este plan anunciado por su fundador, en julio. De esta manera, la compañía ha reforzado su mercado del vehículo eléctrico con el suministro de placas solares para viviendas particulares. Musk señaló que su compañía espera que este producto se venda más incluso que sus autos eléctricos —el buque insignia de la línea de productos Tesla— pues apela a más mercados a nivel mundial, donde el suministro de energía no existe o escasea por horas. Desde 2008, Tesla ha logrado vender más de 125.000 automóviles que funcionan con motores eléctricos, solo en los Estados Unidos.
El «plan maestro»: el techo solar
Los que gustan de la tecnología y las energías renovables saben quién es Elon Musk. Este visionario nació en Sudáfrica, sus padres se divorciaron y antes de cumplir los 18 se fue a vivir a Canadá de donde era oriunda su madre. Desde chico siempre se interesó en la tecnología y los cohetes, pero tal vez más de lo normal para un chico de su edad. Sus compañeros hicieron de su paso por la escuela un calvario y por esta razón, a modo de escapatoria, encontró en el estudio un refugio. Hoy, ya con 45 años, no solo es multimillonario, sino que además es el fundador de X.com, Zip2, SpaceX y Tesla Motors y Solarcity. Recientemente fue noticia en los mercados al anunciar la fusión de las dos últimas para ejecutar lo que el propio Musk llamó «el plan maestro»: proveer la solución completa a la independencia energética residencial.
Con esta premisa, en su última conferencia de inversores reveló el cacareado techo solar (solar roof) la flamante integración de un novedoso tejado solar y una renovada batería de almacenamiento de energía pueden ser la respuesta de su compañía a la necesidad de consumo de electricidad que no genere emisiones de gases de invernadero. La apuesta de Tesla es sin duda arriesgada, a la luz de que Dow Chemicals, firma que venía comercializando techos solares hace cinco años, anunció en julio que dejaría de producir este material porque el mercado para el mismo no se había abierto lo suficiente como para hacer su operación rentable.
Aun así, Tesla ha presentado, a diferencia del techo que capta la energía solar, tejas que convierten la luz solar en electricidad para alimentar el hogar que recubren. El material viene en cuatro estilos distintos: teja con textura de cristal, azulejo de pizarra de cristal, mosaico de la Toscana de cristal y teja de cristal liso. Cada uno otorga una estética diferente a los techos, no obstante todos se parecen bastante a los tejados tradicionales.
De acuerdo con Musk, estos tejados tienen casi el mismo rendimiento (98%) que los tradicionales paneles solares, pero, añadió, su firma viene trabajando de la mano con 3M para emplear en ellos una serie de revestimientos con aditivos que permitan una menor pérdida de energía e incluso rendimientos superiores al promedio. La clave para ello será lograr con estas sustancias que la luz rebote más veces entre las tejas, antes de dejarla escapar.
Aunque no se reveló cuál sería el precio de venta de estas tejas, Musk quiso adelantar que irá por debajo del precio regular de otros techos solares. Al estar hechas de cuarzo, las losetas deberán durar al menos dos o tres veces más que las regulares de asfalto. Tesla espera iniciar las instalaciones de estos equipos hacia el verano estadounidense de 2017, poniendo en el mercado dos de las cuatro opciones que se fabricarán.
Lo que sí se anunció con precio incluido fue la nueva célula de almacenamiento de electricidad producto de energía solar. La Powerwall 2 costará, en su versión más accesible, US$5.500 y tendrá capacidad para 14 kWh. De acuerdo con Tesla, cuenta con poder suficiente para alimentar, con su carga completa, los enchufes de una casa regular con dos dormitorios, incluyendo el refrigerador.
El negocio
En cuánto a su coste, aseguró que “dependerá del tamaño de cada casa, no lo puedo decir”. Lo que sí adelantó es que las baterías Powerball 2 que incorpora este producto no las producirán a escala hasta el año que viene ya que, según explicó, la demanda es muy alta y les cuesta dar abasto.
Tesla destaca que además de ser asequibles económicamente –con un coste menor que un tejado tradicional- incrementan el valor inmobiliario de la vivienda y reducen la huella de carbono de ésta. El tejado solar de Tesla está fabricado de vidrio templado. En palabras de Musk, se asemeja al “cristal utilizado en algunos monitores de ordenadores para mantener la privacidad. No es exactamente polarizado, pero sería una buena explicación”.
La compañía asegura que se trata de un material de larga duración, muy resistente a impactos y con células solares de alta eficiencia. “Si tienes una casa nueva o quieres renovar tu tejado, es el momento de optar por esta solución”, dijo Elon Musk durante la presentación. “Los próximos cinco millones de casas deberían llevar esto. Es más barato, más duradero y fácil de instalar. No veo otra solución mejor”, afirmó el fundador y CEO de Tesla.
En este sentido, el CEO de Solar Cuty, Lyndon Rive, por su parte, explicó también durante la presentación que en los Estados Unidos se instalan cada año 5 millones de tejados nuevos, luego para aquéllas personas que están a punto de reemplazarlos y que no desean invertir en paneles solares en un tejado que es viejo, acudir a uno nuevo con todo integrado es una gran solución.
Un poco de historia
En 2009 Dow Chemicals lanzó células fotovoltaicas llamadas Powerhouse que generaban 12 watts por pie cuadrado, y eran lo suficientemente flexibles y eficientes como para ser incorporadas sobre las tejas. La compañía afirmaba entonces que con esto se rompían las barreras que impedían que la adopción de la energía solar fotovoltaica residencial sea masiva. Las Powerhouse debían ser instaladas en hogares con conexión a la red convencional y estaba diseñadas para que sean de fácil colocación.
Con 350 tejas solares se lograba reducir el consumo entre un 40 y 60%. Sin embargo, los costos de instalación rondaban los 20.000 dólares, por lo tanto los costos elevados y sus problemas de practicidad hicieron que el producto no sea apropiado y dejaron de venderlas hace solo dos meses. DOW no fue la única empresa que se aventuró en intentar lograr la teja solar perfecta, pero siempre han fallado. Las esperanzas están en que Elon Musk finalmente lo logre.