Pareciera que la reunión entre los líderes de China y Estados Unidos fue más positiva y fluida que lo que muchos esperaban. Una señal muy esperanzadora para los mercados, que este lunes seguramente abrirán al alza, luego del cese el fuego que los mandatarios Xi Jinping y Donald Trump acordaron la noche de este sábado después de dos horas y medias de conversaciones.
EEUU dejará los aranceles sobre las importaciones chinas por un valor de 200.000 millones en una tasa del 10 por ciento y acordó no aumentarlas al 25 por ciento «en este momento», dijo la Casa Blanca.
A través de un comunicado, el gobierno estadounidense indicó que «China acordará comprar una cantidad aún no determinada, pero muy importante, de productos agrícolas, energéticos, industriales y otros productos de Estados Unidos para reducir el desequilibrio comercial entre nuestros dos países».
También China acordó comenzar a comprar, de inmediato, productos agrícolas a los agricultores de Estados Unidos.
Tiempo de plazo: 90 días
La Casa Blanca anunció que China y Estados Unidos iniciarán en los próximos días charlas sobre cambios estructurales en las transferencias de tecnología forzadas, la protección de la propiedad intelectual, las barreras no arancelarias, intrusiones y robos cibernéticos, los servicios y la agricultura.
Ambos países acordaron que intentarán que esta «transacción» se complete en los próximos 90 días. En caso de no suceder, los aranceles del 10 por ciento se elevarán al 25 por ciento.
Antes de este encuentro que se llevó a cabo en el marco de la cumbre del G-20, que entre viernes y sábado se celebró en la ciudad de Buenos Aires, el objetivo de China era persuadir a Trump de que abandonara los planes para aumentar los aranceles de 200.000 millones en productos chinos al 25 por ciento a partir del mes de enero. En la actualidad, la tasa es del 10 por ciento.
Constructivas conversaciones entre China y Estados Unidos
Las negociaciones entre los líderes de las dos principales economías del mundo se realizaron en un ambiente, que fue calificado por el máximo diplomático del gobierno chino, el consejero de Estado Wang Yi, como “amistoso”.
«Los presidentes acordaron que las dos partes pueden y deben lograr relaciones bilaterales adecuadas«, dijo Wang, reseñó Reuters.
Sostuvo, sin mayor precisión, que en los momentos “apropiados” habrá más intercambios.
«La discusión sobre temas económicos y comerciales fue muy positiva y constructiva. Los dos jefes de Estado llegaron a un consenso para detener el aumento mutuo de las nuevas tarifas», dijo Wang.
Las dos partes «intensificarán las negociaciones» hacia la eliminación total de todos los aranceles adicionales.
Mejorar el desequilibrio comercial
El consejero agregó que «China está dispuesta a aumentar las importaciones de acuerdo con las necesidades de su mercado interno y las necesidades de la gente”.
Esto incluye los productos comercializables de Estados Unidos, como una manera de aliviar gradualmente el desequilibrio en el comercio bilateral, una de las grandes preocupaciones de Trump y su equipo de gobierno.
Wang añadió que «las dos partes acordaron abrir mutuamente sus mercados. Mientras China avanza en una nueva ronda de reformas, las preocupaciones legítimas de Estados Unidos pueden resolverse progresivamente».
Los miembros del G20 finalizaron su cumbre con la firma de un documento en el que reflejaron “la necesidad de revitalizar el comercio y la Organización Mundial del Comercio (OMC) y también en la preocupación por el cambio climático”.
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