A raíz de la brutal invasión de Rusia a Ucrania, gobiernos occidentales han impuesto sanciones a muchos de los oligarcas amigos y financistas de Putin. Pero, en el tiempo, han aprendido a mantener oculta su riqueza. Una ardua investigación, con ayuda de colaboradores internacionales, precisa que la fortuna de estos facilitadores supera los 17.000 millones de dólares.
Averiguar quién posee qué y cuánto es una tarea difícil incluso para los investigadores policiales experimentados. Por eso The Guardian, en colaboración con Organised Crime and Corruption Reporting Project y otras organizaciones internacionales de noticias, investigaron esas fortunas. Rastrearon la mayor cantidad posible de estos activos y los compilaron en una base de datos para que el público los vea y los use.
Cuentan que comenzaron con una lista de nombres de personas que “participan activamente en la opresión y corrupción del régimen de Putin” elaborada por la Fundación Anticorrupción. Dirigida por el líder opositor encarcelado Alexei Navalny. Pronto la ampliaremos para incluir a otros rusos sancionados por corrupción o por su apoyo a Putin.
“Buscamos terrenos, mansiones, empresas, barcos, aviones y cualquier otro activo de valor que pudiera vincularse mediante pruebas documentales al círculo de Putin. Algunos de estos activos han sido reportados antes. Algunos se revelan aquí por primera vez. Todavía quedan algunos por descubrir: seguiremos buscando más propiedades. Y agregando más nombres a esta base de datos con regularidad”, señala la organización.
Por ahora, hemos descubierto más de $ 17 mil millones en activos globales. Incluidas cuentas bancarias en el extranjero, yates, aviones y propiedades de lujo en Londres, Toscana y la Riviera francesa que se han relacionado con 35 oligarcas y funcionarios rusos que supuestamente tienen estrechos vínculos con Vladimir Putin.
Fortuna de los oligarcas afines a Putin
La organización de Navalny escribió a los gobiernos occidentales solicitando que los nombres de su lista fueran considerados para sanciones. Y desde entonces todos menos uno han sido incluidos en la lista negra de EE UU, la UE, el Reino Unido o Canadá.
Los nombres incluyen a cuatro de los oligarcas más ricos del mundo asociados a Putin. Además de jefes de empresas controladas por el Estado, destacados locutores, jefes de agencias de espionaje, ministros, asesores políticos y gobernadores regionales. Sus nombres fueron leídos en el Congreso de Estados Unidos por legisladores que buscan penas más duras para la élite rusa. Y en el parlamento del Reino Unido por la portavoz de asuntos exteriores de los liberales demócratas, Layla Moran.
Moran dijo a la Cámara de los Comunes: “Los compinches de Putin deben estar sujetos a las sanciones más fuertes posibles ahora. Es a través de ellos que Putin y su círculo íntimo mantienen su riqueza. Si vamos tras sus asociados, vamos tras él. En realidad, estamos en una posición única para hacerlo, porque eligen Londres. Viven aquí: es ‘Londongrad’ para ellos”.
El rastreador de activos ruso ha identificado propiedades o terrenos en el Reino Unido, que en conjunto valen más de 500 millones de dólares. Están vinculados a través de empresas, fideicomisos o parientes a cuatro figuras destacadas en la lista de Navalny. Son ellos Roman Abramovich, Alisher Usmanov, Oleg Deripaska e Igor Shuvalov.
Hasta ahora, la investigación ha visto evidencia de que los nombres están conectados a más de 145 activos que consisten en 35 mansiones, 43 apartamentos y otras 27 propiedades inmobiliarias. Siete yates, más 11 jets privados y helicópteros, con un valor combinado de $ 2.000 millones, han sido identificados como vinculados a solo seis personas.
Cacería de brujas a socios del Kremlin
Algunos de los activos de estos oligarcas vinculados a Putin, recogidos en el rastreador son de dominio público, incluida la mansión Belgrave Square de Deripaska en el centro de Londres, que fue tomada por ocupantes ilegales la semana pasada. Así como los superyates Dilbar, Lena y Amore Vero, vinculados a los oligarcas Usmanov, Gennady. Timchenko e Igor Sechin respectivamente.
Otras posesiones han pasado mayormente desapercibidas, o a veces existieron en casi total secreto. El mes pasado, el Tesoro de EE UU destacó los problemas de la propiedad opaca. “Los oligarcas sancionados y las poderosas élites rusas han utilizado a miembros de la familia para mover activos y ocultar su inmensa riqueza”.
Un portavoz de Deripaska dijo que “no está claro cómo la publicación de este tipo de ‘inventario de activos’ podría servir al interés público. A menos, por supuesto, que por ‘interés público’ se entienda alentar a los ocupantes ilegales a ocupar propiedades privadas. Como hicieron con una casa en Londres perteneciente a los familiares de Deripaska”.
El vocero insistió en que “todas las propiedades y bienes que posee fueron adquiridos por medios justos. El actual frenesí mediático, por lamentable que sea, ciertamente no le da a nadie el derecho de llamar cleptócrata a Deripaska. La caza de brujas en Rusia de la que Deripaska se ha convertido en víctima está impulsada por motivos políticos”.
Asimismo, un portavoz de Usmanov agregó que “la totalidad del capital de él se construyó a través de inversiones exitosas, a veces arriesgadas. Así como a través de la gestión eficaz de sus activos, que es la esencia del negocio. Por lo tanto, caracterizar la fuente de su dinero como ‘no transparente’ es intrínsecamente incorrecto. Y daña la reputación de Usmanov como empresario y filántropo honesto”.
Rusia “pierde” 78 aviones de pasajeros por sanciones
Muchos activos de oligarcas amigos o allegados a Putin han sido congelados o embargados. Según el ministro de Transporte, Vitali Saveliev, Rusia ha visto arrestados 78 aviones en el extranjero por las sanciones occidentales. Y además por el cierre del espacio aéreo de más de treinta países para aviones civiles operados por compañías rusas o que están registrados en Rusia.
Saveliev afirmó que en el momento de la imposición de las sanciones, Rusia tenía 1.367 aviones, de los que 78 fueron arrestados en países extranjeros y no volverán al país. «Hemos transferido (al registro ruso) casi 800 de más de 1.300 aviones. Los aseguramos en una empresa aseguradora rusa (…). Hemos ‘perdido’ 78 aviones», señaló en una reunión del Comité de Política Económica del Consejo de la Federación, el Senado ruso, indicó la agencia oficial TASS.
Rusia cerró su espacio aéreo a los vuelos de 36 países, entre ellos todos los de la Unión Europea y Canadá, en respuesta a la misma medida adoptada por estos estados tras el inicio de la invasión a Ucrania.
El ministro también dijo que era posible que se revisen algunos puntos de la estrategia de transporte de la Federación Rusa hasta 2035, debido a la situación actual. «Hasta qué punto, no puedo decirlo todavía. Juntos, después del final de la operación especial, trabajaremos en esto», manifestó al tiempo que aseguró que más de 30 aerolíneas de 22 países continúan volando a Rusia.