Por Cambio16
10/08/2017
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Los políticos opositores de Venezuela que quieran ser candidatos a gobernadores en las elecciones regionales de diciembre deberán tener un certificado de «buena conducta» expedido por la Asamblea Nacional Constituyente (ANC).
Así lo ha confirmado este jueves Diosdado Cabello, uno de sus miembros más influyentes, colaborador esencial del presidente Nicolás Maduro.
«El que quiera ir debe tener un certificado de buena conducta» de la ANC, dijoCabello durante su programa de televisión en el canal estatal a propósito de que este jueves se cierra el plazo para preinscribir candidatos.
Ese certificado debe decir que «usted nunca llamó a quemar a Venezuela», indicó el también primer vicepresidente del gubernamental Partido Socialista Unido de Venezuela, dirigiéndose a los opositores que promovieron masivas protestas antigubernamentales y pidieron el respaldo de la comunidad internacional.
«Porque -añadió- si usted cree, ciudadano amargado en su casa, que usted ahora se va a ir a inscribir después que llamó a quemar a Venezuela, se fue por el mundo diciéndole que vamos a invadir Venezuela, usted rodó, oyó papá».
Cabello aseguró que este requisito está enmarcado en el decreto aprobado este miércoles por la Constituyente, «Ley Constitucional de la Comisión de la Verdad«, para establecer responsabilidades en los hechos de violencia política que se han producido en Venezuela desde 1999, pero especialmente en las protestas recientes.
Diosdado Cabello ha promovido hasta ahora las decisiones más duras tomadas por la ANC, electa hace casi dos semanas en unos controvertidos comicios a los que solo concurrieron candidatos oficialistas afines el Gobierno del presidente Maduro.
Además, el dirigente chavista recordó que la ANC es «soberanísima» y que «podría decidir permanecer incluso hasta por más de dos años, si fuere necesario».
¿Irán a por su certificado?
La decisión de la oposición de participar en las elecciones regionales fijadas para el 10 de diciembre se dio a conocer este miércoles después de lograrse un consenso en la alianza Mesa de la Unidad Democrática (MUD), que mantenía posiciones encontradas al respecto.
Los opositores abandonaron su declaración de rebeldía inscribiéndose en estas elecciones pese a las dudas sobre el árbitro electoral y sus acusaciones a las instituciones del Estado de estar al servicio del Gobierno de Maduro.
Las principales diferencias para participar en estos comicios tenían que ver con acusaciones del antichavismo de que los oficialistas los bloquearían o manipularían el proceso.
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