Por Gorka Landaburu
01/02/2016
Pedro Sánchez tiene el deber y la obligación de intentar formar gobierno si Mariano Rajoy protagoniza una segunda espantada. Y en el PSOE todos deberían entender que no es momento de cuitas internas. La decisión de Sánchez de someter a la consulta de las bases cualquier posible pacto ha encendido a los barones, por mucho que en público acepten que sean los militantes los que puedan marcar el camino de los socialistas. Mucho hablar de regeneración democrática pero a la hora de la verdad se prefiere seguir por el método del ordeno y mando, del todo atado y bien atado.
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