Por Cambio16
04/08/2017
La Policía y la Guardia Civil han desarticulado un grupo criminal dirigido principalmente por ciudadanos de origen chino y dedicado al cultivo y posterior distribución de marihuana a gran escala en Reino Unido. Casi un año de investigaciones desembocaron en un operativo en el que se han llevado a cabo 21 registros simultáneos en ocho provincias y que se ha saldado con la detención de 31 personas.
Fuentes policiales han informado de que los registros –realizados en las provincias de Vizcaya, Burgos, Valladolid, León, Zamora, Salamanca, Madrid y Guadalajara– han permitido la incautación de más de 22.000 plantas de marihuana, 45.000 euros y una pistola semiautomática del calibre 9 milímetros Parabellum, 92 cartuchos del mismo calibre y una maquina contadora de dinero.
En el curso del operativo los agentes han detenido a 29 personas de distintas nacionalidades, incluyendo la detención en Sevilla de uno de los principales dirigentes de la investigación, por los presuntos delitos de pertenencia a organización criminal, contra la salud pública, defraudación de fluido eléctrico y tenencia ilícita de armas.
En fases previas de la operación se intervinieron 6.500 plantas en dos viviendas y una nave industrial, y se incautaron 36.700 gramos de marihuana listos para el consumo, llevándose a cabo la detención de dos personas.
La organización tenía una gran movilidad y empleaba documentación denunciada previamente como sustraída para la adquisición de vehículos, contratos de alquiler y contratos de luz, lo que ha dificultado de manera extrema la identificación de los verdaderos responsables de los ilícitos investigados. Los miembros de la organización estaban altamente especializados, existiendo un rol bien definido de cada uno de los escalones de la trama descubierta.
La organización
Así, el conseguidor era la persona que se dedicaba en exclusiva a localizar por toda la geografía inmuebles en alquiler que reunieran las condiciones adecuadas para el fin que buscaba la organización. Normalmente, consistían en chalés aislados o naves en polígonos industriales con poca actividad.
Por su parte, los montadores eran los miembros de la organización especializados en el montaje de la instalación necesaria para el acondicionamiento de las plantaciones una vez formalizado el contrato de alquiler. Estas personas trabajaban intensivamente para preparar toda la infraestructura en pocos días y evitar así llamar la atención en exceso.
Acondicionada la instalación, varios miembros de la organización, los cultivadores, utilizando vehículos de alquiler o a nombre de terceros, se encargaban de la adquisición de las semillas, macetas y de la tierra necesaria para el desarrollo de las plantas de marihuana, supervisando frecuentemente el estado de la plantación.