Por Iñigo Aduriz
30/01/2016
- Susana Díaz carga contra Iglesias: «Estoy cansada de sus insultos»
- ¿Qué se juega Pedro Sánchez en el Comité Federal?
- “Es inaceptable que en el PSOE haya quien vea en Podemos un partido independentista”
- “Podemos desea aniquilar al PSOE”
Todos los militantes del PSOE tendrán voz y voto ante un posible acuerdo de gobierno entre los socialistas y otras formaciones políticas que garantice la investidura de Pedro Sánchez como presidente. El secretario general de los socialistas ha anunciado este sábado esa medida pionera en la historia de su partido, con la que pretende blindarse de las posibles desavenencias internas que podría ocasionar cualquier pacto con Podemos, Ciudadanos u otras formaciones políticas.
«Esa decisión eventual que se pueda tomar, de negociación y de acuerdo», ha asegurado Sánchez, «tendrá todos los filtros y garantías posibles«. «Será ratificado por el Comité Federal y también haremos una consulta a la militancia del PSOE», ha asegurado, ante la sorpresa de los asistentes que han irrumpido con aplausos.
Fuentes de la dirección socialistas han matizado, no obstante, que será una votación «consultiva», ya que en cumplimiento a los estatutos del partido, la última palabra la tendrá en todo caso el máximo órgano entre congresos. Esas fuentes han explicado que la consulta «no vincula pero sí compromete políticamente» al partido. Será una próxima reunión de la Ejecutiva del PSOE la que redactará las bases reguladoras de esa futura consulta.
«Con luz y taquígrafos»
Sánchez ha querido dejar claro que no se dedica a la política por su futuro. «Lo último que me preocupa es mi futuro personal. Lo que me preocupa es el futuro de los españoles. Por eso todas las negociaciones que se puedan abrir serán en abierto, con luz y taquígrafos», ha insistido.
En todo caso, el líder del PSOE ha asegurado que, ante cualquier negociación, es necesario hablar «antes de en el quién, en el para qué». Pero ha vuelto a reivindicar un Ejecutivo «progresista y reformista» siempre que Mariano Rajoy no consiga ser elegido en una primera investidura.
Como ya había hecho la presidenta de la Junta andaluza, Susana Díaz, Sánchez ha cargado especialmente contra Podemos. Ha querido dejar claro que él no quiere «hablar de sillones sino de políticas» y, en clara alusión a las recientes declaraciones de Pablo Iglesias, ha lamentado que el PSOE haya sido «víctima de la arrogancia y los desplantes». Él ha defendido el «respeto» como seña de identidad de su partido.
«Sin frentes»
Sánchez también se ha desmarcado de un hipotético acuerdo sólo de izquierdas. «Sin frentes», el líder socialista ha recalcado que no va a ser presidente «a cualquier precio» pero que no está dispuesto «a que los españoles paguen el precio de un nuevo gobierno de la derecha».
Su discurso ante el Comité Federal ha estado, en cambio, lleno de guiños a Ciudadanos. Ha puesto en valor el acuerdo alcanzado con los de Albert Rivera para elegir a Patxi López como presidente del Congreso, y ha querido remarcar una y otra vez su rechazo a los independentistas. «Siempre que ha gobernado el PSOE se ha garantizado una España unida y diversa», ha dicho.
La convocatoria del Congreso
El principal y único punto del orden del día de la reunión de este sábado es, no obstante, la convocatoria del próximo Congreso ordinario que el PSOE celebrará para refrendar a Sánchez como secretario general o, en su defecto, elegir a otro candidato. En las últimas horas, la fecha había provocado rencillas entre los seguidores del actual líder del partido, que apostaban por retrasarla a junio para blindar así al madrileño incluso si se celebraran unas nuevas elecciones, o los barones críticos que apostaban por adelantarla.
Finalmente estos han ganado la primera batalla de hoy y en la Ejecutiva previa al Comité Federal han aprobado que el Congreso sea el 22 de mayo. Según a adelantado la agencia Europa Press las primarias previas al cónclave serán el día 8 de ese mismo mes.