Por Cambio16
30/04/2017
Las pruebas de alcoholemia a las que se sometió el golfista estadounidense Tiger Woods después de que fuera encontrado dormido al volante en una carretera en el sur de Florida dieron negativo, informó este martes el canal televisivo Local 10 de Miami.
Las dos pruebas de alcoholemia que le realizaron parecen respaldar las afirmaciones de Woods, quien había asegurado que la policía no le detuvo porque estuviera conduciendo ebrio, sino porque había quedado dormido al volante tras “una inesperada reacción” al tomar unos medicamentos prescritos por un médico.
El golfista, de 41 años, fue arrestado alrededor de las tres de la madrugada hora local en la ciudad de Jupiter, en el sureste de Florida, por conducir supuestamente bajo la influencia de sustancias tóxicas, alcohol y marihuana (DIU, en inglés).
En un comunicado, Woods se disculpó de sus acciones y aseguró que el alcohol no tenía nada que ver con lo sucedido. “Lo que ocurrió fue una reacción inesperada a unos medicamentos recetados. No me había dado cuenta de que la mezcla de medicamentos me había afectado tan fuertemente”, señaló Woods.
Woods fue puesto pocas horas después en libertad sin necesidad de fianza, según la oficina del alguacil del condado de Palm Beach, al norte de Miami.