Por Cambio16
12/11/2016
Apenas tres días después de que el multimillonario Donald Trump ganara las elecciones a la Presidencia estadounidense, las protestas contra su victoria no dejan de proliferar y de radicalizarse a lo largo y ancho del país. A través de su perfil de Twitter, Trump ha culpado a los medios de comunicación de instigar estas marchas.
Just had a very open and successful presidential election. Now professional protesters, incited by the media, are protesting. Very unfair!
— Donald J. Trump (@realDonaldTrump) 2016(e)ko azaroak 11
“Acabamos de tener una elección presidencial muy transparente y exitosa. Ahora manifestantes profesionales, incitados por los medios, están protestando. ¡Muy injusto!”, ha asegurado el magnate.
Si en la noche del jueves fueron cientos las personas que salieron a las calles manifestando su rechazo al presidente electo, en la madrugada del viernes al sábado ya han sido varios miles de ciudadanos los que han tomado las calles de las principales ciudades del país.
Según informan prácticamente todos los medios estadounidenses el movimiento Not my president (No mi presidente) que muestra su repulsa al triunfo de Trump en las urnas ha realizado manifestaciones de costa a costa. Así, las principales movilizaciones han tenido lugar en Nueva York, Los Ángeles o Washington pero también en Filadelfia, Dallas, Minneapolis o Portland.
Ha sido precisamente en esta última ciudad del estado de Oregón donde, siempre según esos medios norteamericanos, se han producido algunos episodios violentos. La policía de la ciudad ha asegurado que se han lanzado «proyectiles» contra los agentes, que respondieron con gases lacrimógenos y realizando varias detenciones. También han informado de que hay un herido de bala.
Aumentan los actos racistas
Estas protestas coinciden, asimismo, con un brote de ataques racistas a lo largo de la nación más poderosa del mundo, cuyo nuevo presidente está respaldado por grupos xenófobos como el Ku Klux Klan.
Según informa el diario El País en su edición de este sábado, en Filadelfia, un escaparate ha sido pintado con “Sieg Heil 2016”, una proclama nazi, y el nombre de Trump al lado de una esvástica. Asimismo, en la Universidad de Nueva York, se ha escrito “Trump” en la puerta de una sala de culto para musulmanes. Y en una escuela de Minnesota, donde reside una importante comunidad somalí, han pintado “Volved a África” al lado del lema electoral del republicano “Hacer grande a América de nuevo”.