Por Cambio16
El Mecanismo Europeo de Estabilidad (MEDE) ha recibido la petición de Grecia para un tercer programa de ayuda, según confirmó a Efe su portavoz. De momento no se conoce la cantidad de ayuda que solicita el Gobierno de Atenas ni la extensión que tendrá el programa.
Mientras esto sucedía, el Gobierno griego decretaba la segunda prórroga del corralito impuesto hace diez días hasta el próximo lunes, después de que el Banco Central Europeo (BCE) decidiera mantener la cantidad máxima de liquidez de emergencia que los bancos griegos pueden pedir al Banco de Grecia.
Grecia prometió empezar a aplicar reformas «a partir de la próxima semana», según se desprende de la carta de solicitud de rescate enviada al MEDE.
Según la carta enviada por el ministro de Finanzas griego, Euclides Tsakalotos, el Gobierno presentará este jueves una amplia lista de reformas para ser implementadas en las áreas de «sostenibilidad fiscal, estabilidad financiera y crecimiento económico a largo plazo».
La carta no especifica en detalle las reformas inmediatas que plantea, pero sí alude a que afectarán a la fiscalidad y a las pensiones. Además, señala, habrá acciones adicionales para «reforzar y modernizar la economía».
Artículos 12, 13 y 16
En la solicitud de asistencia al MEDE, el Gobierno invoca los artículos 12, 13 y 16 del tratado.
Según el artículo 12, el MEDE concede créditos a países miembros si con ello garantiza la estabilidad financiera en su conjunto y de sus Estados.
De acuerdo con el artículo 13, Grecia pide asistencia financiera por un periodo de tres años, y detalla que el crédito será usado para afrontar las obligaciones de deuda y asegurar la estabilidad del sistema financiero.
El artículo 16 hace referencia a los mecanismos de concesión de estos créditos.
«Grecia está comprometida a honrar sus obligaciones financieras con todos sus acreedores de manera completa y a tiempo», afirma la misiva.
Además, Tsakalotos dice «confiar» en que los Estados miembros tendrán en cuenta la urgencia de la solicitud del crédito, dada la fragilidad del sistema bancario heleno, la delicada situación de la liquidez disponible, las obligaciones venideras, la acumulación de atrasos internos y el deseo de aclarar los atrasos excepcionales al Fondo Monetario Internacional y al Banco de Grecia.
«Reiteramos el compromiso de Grecia para seguir siendo un Estado miembro de la zona euro y a respetar las normas y regulaciones como Estado miembro», concluye la carta, que «reemplaza» a la enviada el 30 de junio.
Pasos a seguir
La petición de Grecia será analizada a nivel técnico en una teleconferencia del llamado Grupo de Trabajo del Euro, según indicó Michel Reijns, el portavoz del presidente del Eurogrupo, Jeroen Dijsselbloem, en su cuenta oficial de Twitter.
Reijns también precisó que finalmente no se celebrará una teleconferencia de los ministros de Economía y Finanzas de la zona del euro como estaba previsto.
Atenas ha dirigido su petición formal al presidente del consejo de gobernadores del MEDE, el holandés Jeroen Dijsselbloem.
Esta solicitud tendrá que ser examinada ahora por la Comisión Europea (CE), el Banco Central Europeo (BCE) y el Fondo Monetario Internacional para determinar si entraña un riesgo para la zona del euro, la sostenibilidad de la deuda y las necesidades concretas de capital, según explicaron fuentes europeas.
Una vez realizada esta primera evaluación y si se decide abrir de forma definitiva el proceso para un tercer rescate, la propuesta volverá al MEDE que elaborará un memorándum de entendimiento con las condiciones que implicará la ayuda, es decir, las medidas que deberá adoptar Grecia a cambio del apoyo.
El Eurogrupo o los líderes comunitarios tendrán a continuación que dar su visto bueno y los parlamentos nacionales aprobar el programa antes de que el primer desembolso pueda hacerse efectivo.
Este sábado se celebra en Bruselas una nueva reunión extraordinaria del Eurogrupo y el domingo se reunirán los líderes del euro y de la UE en dos cumbres consecutivas.
Corralito
Las entidades bancarias y la Bolsa de Atenas permanecerán cerradas hasta el lunes y el límite de retirada de efectivo en los cajeros automáticos continuará siendo de 60 euros diarios.
Se mantiene la prohibición de todas las transacciones de dinero al extranjero con excepción de los pagos para las importaciones de productos de primera necesidad.
En cambio, las transacciones electrónicas en el interior del país no están sujetas a ninguna restricción, así como la retirada en cajeros con tarjetas de bancos extranjeros.
Los jubilados y los desempleados que no disponen de tarjetas de crédito y débito podrán retirar un máximo de 120 euros a la semana en las sucursales bancarias abiertas solo para este cometido.
En caso de que cuenten con una tarjeta también pueden sacar los 60 euros diarios.
La única novedad del nuevo decreto es que limita a 1.000 euros el dinero en efectivo que cada persona puede llevar consigo cuando viaja al extranjero.
Fuentes bancarias citadas por el diario Kathimerini estiman que la liquidez actual de los bancos es suficiente para cubrir las necesidades diarias en cuanto a la retirada de dinero, pero subrayan que sin un aumento de la liquidez a la que pueden acceder por parte del BCE el próximo lunes, el efectivo de los cajeros automáticos podría empezar a escasear.