Por: Cambio 16
26/11/2016
La comunidad cubana radicada en Miami (sur de Estados Unidos) salió a las calles para celebrar la muerte del líder de la Revolución de la isla, Fidel Castro.
Apenas se conoció la noticia en altas horas de la noche de esa ciudad, cientos de personas llenaron las avenidas de la llamada «pequeña Habana» para festejar el fallecimiento.
Con banderas y cacerolas, los cubanos que en su mayoría escaparon de su país natal por la dictadura, portaban carteles en los se repetía la palabra «libertad».
«No se celebra la muerte de un ser humano, se celebra la muerte de un dictador«, dijo el alcalde de Miami, Tomás Regalado.
Analistas cubanos, radicados en Estados Unidos, opinan que luego del fallecimiento de Castro, viene la reconstrucción de Cuba y que la disidencia en el exterior debe formar parte de ésta.
«Con la participación real, efectiva y significativa del pueblo cubano en el exilio en el proceso de transformación, sobre todo en lo económico y social, definitivamente los cubanos van a poder alcanzar un estado de balance y de prosperidad», dijo a Efe el presidente de la influyente Fundación Nacional Cubano-Americana (FNCA), Francisco «Pepe» Hernández.
Por su parte, el escritor, periodista y vicepresidente de la Internacional Liberal Carlos Alberto Montaner apuntó que el papel del exilio debe ser el de respaldar y facilitar la ayuda financiera del exterior hacia Cuba para agilizar el proceso de reconstrucción de la isla.
«Eso se puede hacer desde EE.UU., Europa y Latinoamérica. Creo que Cuba tendrá canales para la reconstrucción muy eficientes», afirmó Montaner.