Por Andrés Tovar
12/04/2017
La potencialidad del turismo español vuelve a ser laureada: el Foro Económico Mundial (FEM) publicó su Informe de Competitividad de Viajes y Turismo correspondiente a 2017, un estudio de 387 páginas que examina 136 países mirando varios factores que contribuyen al potencial turístico, incluyendo la sostenibilidad del medio ambiente, la infraestructura, así como la seguridad y la seguridad. Y España es ubicada nuevamente en en primer puesto de este importante conteo.
«España mantiene el primer lugar a nivel global en el conteo T&T (travel and tourism/viajes y turismo), su éxito se puede atribuir a una oferta única tanto de recursos culturales como naturales combinada con una sólida infraestructura de servicios turísticos, la conectividad del transporte y un fuerte apoyo político» reza el informe del FEM sobre las bondades del país para el viajero y para la industria turística.
Resalta el informe que el sector turístico español no sólo se ha beneficiado de la política fiscal del país, sino también del declive del turismo en el este de Europa. «Sin embargo, estos acontecimientos no son los únicos determinantes de la capacidad de España para ofrecer una excelente oferta. El reto ahora es seguir buscando formas de mejorar, dada la madurez del sector. Si bien el transporte terrestre de España se clasifica entre los 15 primeros, éste espera mejoras y modernizaciones; el entorno empresarial puede mejorarse, los trámites para lograr permisos de construcción siguen siendo onerosos y hay que mejorar la apertura internacional», agrega el informe.
El Informe de Competitividad de Viajes y Turismo incluye, luego de España, a Francia, Alemania, Japón, Reino Unido, EEUU, Australia, Italia, Canadá y Suiza, para completar así los diez primeros puestos.
De acuerdo con el informe, la industria del turismo mundial genera al año unos $ 7.6 billones de dólares y casi 300 millones de puestos de trabajo. Para algunos países, el turismo representa casi la mitad de su PIB, como sucede en países insulares como Aruba, pero también en destinos inesperados como los territorios palestinos y Camboya.
Por supuesto, la industria del turismo mundial también tiene un lado oscuro. El tráfico aéreo se ha duplicado cada 15 años desde 1980, según el informe, y, en general, el turismo es responsable del 5% de las emisiones globales de CO2. La industria de los restaurantes, especialmente en los países en desarrollo, pueden tomar un peaje si comienza a cimentarse en los sistemas de producción de alimentos locales; y la construcción de hoteles puede conducir a la deforestación y la degradación del medio ambiente.
“Es importante reconocer que los procesos, mecanismos y actividades relacionadas con el turismo también dañan el medio ambiente”, según el informe, que además reconoce y promueve la popularidad de las iniciativas de ecoturismo, exhortando al apoyo al medio ambiente a través del “turismo rural”.
Las clasificaciones del Índice de Competitividad de Viajes y Turismo tienen en cuenta “el conjunto de factores y políticas que permitan el desarrollo sostenible del sector viajes y turismo, a su vez, contribuye al desarrollo y la competitividad de un país.”