Por Cambio16
1/11/2015
Las autoridades egipcias y rusas descartaron la posibilidad de que el Airbus A321 de la compañía rusa MetroJet siniestrado en la península egipcia del Sinaí con 224 personas a bordo haya sido derribado desde tierra.
«Expertos aseguraron que técnicamente no se puede derribar un avión que vuela a esa altura, y es la caja negra la que determinará la causa», declaró en una rueda de prensa el primer ministro de Egipto, Sherif Ismail.
Las declaraciones de Ismail se producen poco después de que el Ministerio de Transporte ruso calificara de «no verídicas» las informaciones que apuntaban a que el avión ruso podría haber sido objeto de un ataque terrorista.
«En algunos medios de comunicación han aparecido informaciones acerca de que el avión de pasajeros ruso que volaba de Sharm el Sheij a San Petersburgo fue alcanzado por un misil lanzado por terroristas. Esta información no puede considerarse verídica», afirmó el ministro de Transporte ruso, Maxim Sokolov.
Insistió: «Según los datos de que se dispone actualmente, basados en nuestros contactos de trabajo con la parte egipcia, la información de que el avión fue derribado no se puede considerar verídica».
Ambos desmentidos fueron precedidos por un comunicado del grupo yihadista Wilayat Sina, filial egipcia de la agrupación terrorista Estado Islámico (EI), en el que se aseguraba que el Airbus fue derribado por sus combatientes.
«Que sepan los rusos y sus aliados que no hay seguridad para ellos en la tierra de los musulmanes ni en sus espacios aéreos», afirmó en un comunicado Wilayat Sina, que opera en península del Sinaí, y que vinculó su supuesto ataque con la operación militar lanzada por Rusia en Siria. «Mueren decenas de personas en el territorio de Shams (Oriente Medio) por los bombardeos de sus aviones y, al igual que matan, serán matados», concluyó el comunicado.
A pesar de estos desmentidos, la aerolínea alemana Lufthansa, la primera de Alemania, ha asegurado que no sobrevolará la península del Sinaí hasta que se aclaren completamente las circunstancias de la catástrofe.
Fuentes de la compañía aérea confirmaron que se evitará por razones de seguridad el espacio aéreo sobre la península, después de que el diario «Die Welt» avanzara esa información.
El aparato que cubría el trayecto Sharm el Sheij-San Petersburgo, se estrelló unos 23 minutos después del despegue.
El Gobierno egipcio detalló en un comunicado que, de los 217 turistas que viajaban a bordo del avión, 214 eran de Rusia y tres de Ucrania, y que entre ellos había 132 mujeres, 62 hombres y 17 niños. Además, volaban siete miembros de la tripulación, de nacionalidad rusa.
Las cajas negras del avión también fueron halladas, lo cual permitirá esclarecer las causas del incidente.
El siniestro es el más trágico en Egipto desde el año 2004, cuando 148 personas, de ellas 135 turistas franceses, murieron al precipitarse en el mar Rojo un Boeing 737 de la compañía egipcia Air Flash minutos después de despegar de Sharm el Seij.