Por Cambio16
ACTUALIZADO 29/09/2016
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El día D del PSOE no será el próximo sábado sino este mismo miércoles. Según han confirmado a Cambio16 fuentes de Ferraz, esta misma tarde ha llegado a la sede federal de los socialistas un escrito en el que 17 miembros de la Ejecutiva federal han presentado su dimisión. Esto podría implicar el cese de facto de toda la dirección socialista y, por tanto, el final de Pedro Sánchez al frente de la Secretaría General del partido.
Entre los dimisionarios, y además de Antonio Pradas y Eva Matarín, que han sido quienes han presentado las firmas, figuran, según la agencia Efe, la presidenta del PSOE, Micaela Navarro; el presidente de Castilla-La Mancha, Emiliano García-Page; el de la Comunidad Valenciana, Ximo Puig; la secretaria de Relaciones Internacionales, Carme Chacón, y el exdirigente madrileño Tomás Gómez. Además, María José Sánchez Rubio, Mariluz Rodríguez, José Miguel Pérez, Manuela Galiano, Noemí Cruz, Francisco Pizarro, Juan Pablo Durán, Ascensión Murillo, Carlos Pérez y Estefanía Martín.
La acción promovida por los críticos con Sánchez tiene lugar tres días antes de que se celebre el Comité Federal en el que se va a someter a votación la propuesta de Sánchez de celebrar el Congreso del partido en diciembre y las primarias para la elección del candidato a la Presidencia el 23 de octubre.
Según el artículo 36 o) de los Estatutos del PSOE, si dimiten «la mitad más uno» de los miembros de la Ejecutiva se tiene que celebrar un Comité Federal extraordinario para nombrar una nueva dirección del partido, lo que se interpretaría como el relevo del secretario general. En el Congreso socialista celebrado en julio de 2014 se eligió una Ejecutiva liderada por Sánchez y compuesta por otros 37 miembros. De ellos, tres ya no pertenecen a la Ejecutiva –el fallecido Pedro Zerolo, el gallego José Ramón Gómez Besteiro y el canario Javier Abreu– lo que provocaría que con 17 dimisiones se podría forzar la salida de Sánchez.
La reacción de la dirección
En rueda de prensa a última hora de la tarde, el secretario de Organización del partido, César Luena, ha explicado que tras las dimisiones este jueves se reunirá lo que queda de Ejecutiva y convocará ese Comité Federal que a su vez ponga fecha al Congreso extraordinario «para que voten los militantes, para que voten los militantes», ha recalcado en numerosas ocasiones. Contradecía así la versión de los críticos, que consideran que es el Comité de Garantías el que debe encargarse del proceso.
Luena, que ha considerado que por el momento tanto Sánchez como el resto de miembros de la dirección siguen con plenos poderes, ha pedido «serenidad a la militancia» y ha querido «agradecer a la militancia su honda preocupación y su comportamiento ejemplar». A los dirigentes les ha exigido «responsabilidad y altura de miras». «Los españoles nos están mirando y debemos solucionar democráticamente las diferencias en el Comité Federal del partido», ha recalcado. También ha dicho que «la fuerza de los militantes es imparable».
Ademá, Luena ha acusado a «algunos dirigentes del partido», en clara alusión a Susana Díaz o a Felipe González, de instigar las dimisiones para «torcer la voluntad de sus órganos legítimos respaldados por sus militantes» y para que los afiliados «no hablen».