Por Cambio16
Las Fuerzas de Seguridad han detenido en Francia a dos de los presuntos jefes de ETA, David Pla e Iratxe Sorzábal. La operación conjunta entre la Dirección General de Seguridad Interior (DGSI) y la Guardia Civil supone «un golpe mortal» a la estructura encargada de gestionar el arsenal del que aún dispone la banda, ya que deja a ETA sin responsables de peso y de experiencia, según apuntan varias fuentes a la agencia Efe.
En la operación Pardines, desarrollada en la localidad francesa de Saint-Étienne-de-Baigorry, en el departamento de Pirineos Atlánticos, han sido arrestadas dos personas más: Pantxo Flores, propietario de la casa rural donde se escondían los dirigentes de ETA y que ya fue arrestado en 2007 por su relación con la banda, y Ramón Sagarzazu Gaztelumendi, Ramontxo, antiguo jefe del aparato internacional de la organización terrorista.
El ministro del Interior, Jorge Fernández Díaz, ha afirmado que las detenciones suponen el «descabezamiento absoluto» de la banda terrorista y ha añadido que ETA es desde hace tiempo «un cadáver al que le falta expedir el certificado de defunción».
David Pla e Iratxe Sorzábal
Ambos estaban intentando desde hace meses obtener algún tipo de contraprestación por la capitulación definitiva de la banda, a la que la Guardia Civil y la DGSI ha dado el golpe «mortal».
Un golpe definitivo asestado en una operación a la que sus responsables han bautizado como «Pardines», en homenaje al guardia civil José Antonio Pardines, considerada la primera víctima mortal de ETA asesinado en 1968 en Villabona (Guipúzcoa) en un control de carretera.
Por parte francesa, en la operación estuvieron implicados la Policía Judicial de Burdeos, la Subdirección Antiterrorista (SDAT) y la Dirección General de Seguridad Interior (DGSI, los servicios secretos).
Dirigían el «aparato político»
Pla y Sorzabal dirigían el «aparato político» de la banda y eran los encargados de tratar de obtener contraprestaciones por la capitulación definitiva de ETA, además de gestionar el arsenal armamentístico y explosivo del que aún dispone la organización terrorista.
Ambos formaban, junto con Josu Ternera, la cúpula de ETA y fueron los encargados de la lectura del comunicado en el que se anunció el «cese definitivo» de la actividad armada de la banda, así como del intento de negociación política que se frustró en Noruega, país del que fueron expulsados.
Desde entonces, la lucha antiterrorista les situaba en Francia, donde este martes han sido detenidos gracias a la colaboración de la Guardia Civil y la Dirección General de Seguridad Interior (DGSI) francesa.
La operación ha sido bautizada como «Pardines», en homenaje al guardia civil José Antonio Pardines, considerada la primera víctima mortal de ETA, asesinado en 1968 en Villabona (Guipúzcoa) en un control de carretera.
David Pla Martín, nacido en Pamplona hace 40 años, fue portavoz de la ilegalizada organización juvenil Jarrai y candidato por Herri Batasuna en las elecciones municipales de 1995 antes de formar parte del comando Aragón, los años 1999 y 2000.
En 2000, fue detenido en Zaragoza por su pertenencia al comando de liberados Eskiula y condenado a seis años de prisión por integración en banda armada. En 2006 fue puesto en libertad y en abril de 2010 detenido de nuevo en Hendaya (Francia) en el marco de la operación Halboka contra la estructura orgánica de ETA dedicada a mantener la disciplina de los presos.
Tras su puesta en libertad por las autoridades judiciales francesas, pocos días después de su detención en abril de 2010, David Pla pasó a la clandestinidad y siguió vinculado al «aparato político» de ETA, del que llegó a ser su máximo responsable.
Por su parte, Iratxe Sorzabal Díaz, de 43 años, natural de Irún (Guipúzcoa), lleva en paradero desconocido desde 2001, cuando fue puesta en libertad provisional tras ser detenida.
Ha estado integrada en diferentes «aparatos» de ETA antes de su plena incorporación en el «aparato político», que se materializó tras la detención en octubre de 2009 del hasta entonces responsable, Aitor Elizaran Aguilar.
Entre 1994 y 1997 fue responsable del asesinato de dos agentes de la Policía Nacional en diferentes atentados y de una mujer en el atentado contra El Corte Inglés en Valencia.
En noviembre de 1997 fue detenida en Francia e ingresó en prisión hasta su expulsión de territorio francés el 31 de agosto de 1999.
Por su parte, Ramón Sagarzazu Gaztelumendi quedó en libertad en 2012 después de haber cumplido una condena en de 10 años de prisión en Francia por su pertenencia a ETA.
Sagarzazu, un histórico que fue detenido por primera vez en 1986, estuvo implicado en la preparación de las negociaciones entre ETA y el Gobierno español, según la información que obtuvo la Policía francesa cuando le detuvo en 2005.
Las últimas detenciones de etarras en Francia se produjeron hace poco más de dos meses. El 7 de julio fueron capturados en una casa de Osses, también en el departamento de los Pirineos Atlánticos, Xabier Goienechea e Iñaki Reta de Frutos, considerados responsables de la logística de la banda.