Por Andrés Tovar
11/07/2017
Cuanto más va trascendiendo sobre el crimen que acabó con la vida de Naiara, la niña de 8 años de Huesca asesinada en Sabiñánigo por su tío, más cruel se revela. Según datos de la autopsia y la propia confesión del presunto asesino, un lucense de 33 años, las palizas eran frecuentes.
Según las informaciones recogidas por los medios de comunicación y ampliamente difundidas este martes, además de las graves heridas que provocaron la muerte de la niña, Naiara, su cuerpo presentaba multitud de cicatrices y marcas que los forenses atribuyen a agresiones anteriores. La instrucción se está desarrollando bajo secreto de sumario, mientras el lucense Iván Pardo Pena ha sido enviado a prisión provisional sin fianza como presunto autor de un delito de asesinato.
Este lamentable suceso es sólo una muestra de una realidad latente, pero al que no se le ha expuesto su total dimensión. La violencia infantil en España va en aumento y cada vez en formas más dantescas, por lo que la necesidad de hacer visible los casos y las estadísticas a fin de crear conciencia se hace necesario.
Las cifras aterran: Cada día se detectan de media 37 casos de niños posibles víctimas de maltrato familiar en España, en un año se detectaron hasta 13.818 menores víctimas de 17.149 tipos de abuso y en 8.088 casos el maltrato fue considerado leve o moderado, en 5.730 fue grave. Los números son oficiales y pertenecen al Ministerio de Sanidad que, en este año, logró publicar la última estadística del Registro Unificado de casos de sospecha de Maltrato Infantil (RUMI), la principal herramienta para medir estos casos de que dispone ese despacho.
Un drama puertas adentro
El RUMI se puso en marcha por primera vez en el año 2012, pero no ha sido hasta el 2015 (año de referencia del último informe recién publicado) cuando se ha conseguido recabar información de todas las Comunidades Autónomas. Sin embargo, el informe del Ministerio advierte de que no en todas la Comunidades se está empleando la herramienta con la misma diligencia, por lo que la estadística puede no recoger todos los casos de abuso infantil que se producen en España.
Sobre los 13.818 menores abusados, el registro puntualiza que los malos tratos detectados (8.088) son categorizados como «leves o moderados», pero otros 5.730 han sido potencialmente «graves». El 55% de las víctimas fueron niños, a excepción del delito de agresión sexual, donde las niñas son el doble de víctimas que los niños (463 a 224).
Asimismo, un 51% de los abusos documentados se tildó de «negligencia» por parte de los adultos responsables, el 26% eran abusos de tipo emocional, un 19% fueron agresiones físicas y el 4% abusos sexuales. Por edades, el grupo más numeroso de menores potencialmente víctimas de maltrato en el entorno familiar tienen entre 11 y 14 años (3.760), mientras que los menores de tres años suman 2.324.
Los entornos en los que se están detectando más a menudo los malos tratos intrafamiliares que se comunican al registro ministerial son, por ese orden: servicios sociales, médicos, Policía y, en última instancia, centros educativos.
Legislar para ellos
Este martes, los grupos parlamentarios han apoyado este martes una iniciativa de la organización Save The Children para pedir al Gobierno una ley orgánica para erradicar la violencia contra la infancia. La propuesta exige, además, que el texto se tramite en el menor tiempo posible y que, en todo caso, los trabajos para su aprobación no excedan los doce meses. Esta proposición no de ley llega después de sucesos recientes como el de Naiara.
Los firmantes exigen que la norma esté acompañada de una estrategia, con plazos y recursos suficientes, que implique a todas las partes involucradas con un conjunto de medidas disciplinarias de prevención centradas en los niños y que presten especial atención a las familias y a sus necesidades particulares.
«Debe abarcar todo tipo de violencia, debe trabajar en la prevención y en la coordinación de los sistemas de protección que ya existen, así como mejorar en la ayuda a los niños que ya han sufrido violencia, para que no vivan marcados sino con normalidad», ha apuntado la directora de Sensibilización y Políticas de Infancia de Save the Children, Ana Sastre.
En declaraciones a los medios, Sastre ha señalado este día como «importante» para los más de 40.000 niños que el año pasado denunciaron haber sido victimas de episodios violentos. En este sentido, ha destacado que la mitad de las víctimas de agresiones sexuales son menores de edad. «Ha llegado el momento de decir basta», ha indicado la responsable de la ONG, que ha celebrado el apoyo de todos los partidos en la Cámara Baja.