Por Iñigo Aduriz | Foto: Carlos Iglesias
07/11/2016
El debate abierto en Colombia a raíz del acuerdo alcanzado entre el Gobierno de ese país y las FARC que fue sin embargo rechazado por la ciudadanía en el plebiscito que tuvo lugar el pasado 3 de octubre, se ha trasladado este lunes al centro de Madrid.
Los expresidentes colombianos Andrés Pastrana y Álvaro Uribe, fervientes defensores de la campaña por el ‘no’, y el exjefe del Ejecutivo español José María Aznar, han expresado en un acto sus razones para rechazar el pacto de La Habana suscrito por el equipo del presidente José Manuel Santos y las FARC y han emplazado al Gobierno de Mariano Rajoy a que acate el resultado del referéndum. Le han pedido, así, que modifique su posición favorable al acuerdo para ayudar a que se cambien las condiciones del mismo y se consiga un «gran acuerdo nacional» que, a su juicio, cumpla con las garantías democráticas y jurídicas con las que no se ajustaba el texto sometido a votación.
En el encuentro, organizado por el Instituto Atlántico de Gobierno, Aznar ha confiado en que tanto Rajoy como el nuevo ministro de Asuntos Exteriores, Alfonso Dastis, «tomen conciencia» sobre los cambios que, según él, necesita el acuerdo entre el Ejecutivo colombiano y las FARC porque, de lo contrario, «sería insólito» y tendría «unas consecuencias políticas devastadoras despreciar la voluntad expresada por el pueblo colombiano».
La «entrega de la democracia»
Tras alabar que Uribe y Pastrana ganaron el referéndum al apostar por el ‘no’ y enfrentándose así a «su Gobierno, al Gobierno estadounidense, a los gobiernos europeos y al Vaticano», el expresidente español ha refrendado su rechazo al pacto entre el Ejecutivo de Santos y las FARC: «¿Yo aceptaría en materia antiterrorista los términos de ese mismo acuerdo para España? No. Nunca he aceptado para ningún país lo que no haría en el mío«, aseguraba Aznar.
Uribe, por su parte, ha insistido en que «la paz no puede ser de entrega de la democracia» como, a su juicio, ha sucedido con el acuerdo en Colombia, y ha rechazado cualquier «cambio cosmético» que trate de hacer el Ejecutivo de Santos sobre el texto rechazado ya que, según él, es necesaria una mesa de negociación que promulgue un «gran acuerdo nacional» para reformar el documento de La Habana.
Tanto él como Pastrana han recalcado que su oposición se debe a que el pacto supone la «impunidad» de los delitos de lesa humanidad y por el «golpe de Estado de la Justicia» que a su juicio se ha perpetrado avalando la entrada en el sistema colombiano de jueces extranjeros. Uribe ha insistido, además, en que «no ha habido arrepentimiento» por parte de las FARC.
Interrupciones en la sala
Durante el acto varias personas han interrumpido a los conferenciantes denunciando las que han considerado como «mentiras» de la campaña por el ‘no’ y mostrándose a favor de las políticas puestas en marcha por Santos. Uribe y Pastrana les han respondido aludiendo a sus condiciones de víctimas del conflicto –ambos han sufrido varias decenas de atentados– y asegurando que ha sido el Gobierno colombiano el que ha faltado a la verdad durante el proceso.